Hepatitis aguda: el niño trasplantado en Rosario mejora favorablemente y ya no requiere de respirador

Con ocho años, había sido sometido a un trasplante de hígado en el Sanatorio de Niños de Rosario a razón de su cuadro de hepatitis aguda de origen desconocido, pero ya evoluciona favorablemente y no requiere de un respirador.

“El órgano está funcionando. Que Pablo se haya despertado y se haya desvinculado del respirador, aunque necesite una ventilación no invasiva, quiere decir que el hígado está activo” comentó el cirujano Lisandro Bitetti al dar el parte médico.

El trasplante se había logrado hacer porque apareció un donante de la provincia de La Pampa y el procedimiento se llevó a cabo el martes pasado durante las horas del mediodía, cuando el niño ya se encontraba en estado "crítico", según señalaban los profesionales de la salud que seguían el caso con gran preocupación.

Bitetti explicó que el hígado es un órgano que funciona como filtro y que, si no se hubiera hecho el trasplante, Pablo seguiría sedado y conectado al respirador, sin poder mostrar los pasos que va dando para poder salir adelante en su tan complicado cuadro.

El paciente, entre tanto, permanece en terapia intensiva y, en reemplazo de la asistencia mecánica respiratoria, se le aplicó una ventilación "no invasiva", con un estado bastante somnoliento, sin lucidez al ciento por ciento y sin saber aún que fue trasplantado, dado que los médicos consideran que es muy chiquito como para darle una noticia de ese tenor.

Para cerrar el parte médico, Lisandro Bitetti aprovechó el momento de exposición y remarcó la importancia de la donación de órganos para poder salvar vidas en estados tan críticos como este y tantos otros que hay en el país.