La salud en crisis: sigue la ola de amenazas de renuncias en Mendoza

La amenaza de llevar adelante renuncias masivas y una huelga  en el sector salud sigue latente mientras desde el Ministerio de Salud continúan con las tratativas para llegar a tiempo con una propuesta antes de que finalice esta semana. Es que tal como había anunciado el gremio que nuclea a los profesionales de la Salud (Ampros), hasta hace unos días, al menos 60 médicos pediatras del Hospital Humberto Notti que atienden en el área de la guardia y varias especialidades consideradas críticas habían determinado no renovar sus prestaciones hasta tanto no se regularice la situación laboral. El plazo, en tanto, es hasta este viernes 1 de abril.

Lo cierto es que los prestadores auto-convocados y acompañados por el gremio, consideran que ha habido un "descuido rotundo hacia el sector que en la actualidad está absolutamente precarizado". "Se trata de un problema de salud pública de Mendoza. Todos los profesionales que trabajamos con prestaciones no fuimos incluidos en las paritarias y no ha habido una renovación en los montos de las prestaciones", se refirió al tema Andrés Serrano, médico cirujano del Hospital Humberto Notti.

Serrano lleva más de tres años afrontando cirugías en el hospital pediátrico más importante de la región. Detalló además que los profesionales están solicitando que el Gobierno tenga en cuenta también el blanqueo de las prestaciones médicas que implican una mayor dedicación. Solo a modo de ejemplo, hay que recordar que el pago a los especialistas de áreas clave se encuentra por debajo de la línea de pobreza en muchos casos y se paga a través de la presentación de una factura que no supera los 60 mil pesos en muchos casos. 

Pero además, aseguró Serrano, los médicos que facturan ni siquiera cuentan con un pago equiparado con sus colegas de otras provincias e inclusive, otros establecimientos privados. En muchos casos, aseguraron, se genera una situación de "éxodo" de especialistas a provincias vecinas.  

Hasta el jueves, todo indicaba que entre el total de médicos que se habían sumado a la ola de reclamos en rechazo a los montos cobrados bajo la modalidad de prestaciones (es decir, facturando) llegaba a 96. Lo cierto es que en las últimas horas, nuevos pedidos se agregaron por parte de al menos 26 profesionales de los hospitales Central, Alexander Fleming y El Carmen, que depende de la Obra Social de Empleados Públicos (Osep).

Además de los médicos que trabajan en las áreas de la guardia de esos nosocomios, en la lista de los que sostienen la posibilidad de no renovar los contratos por prestaciones figuran médicos anestesistas e intensivistas.

Malestar visibilizado

En las redes sociales, el malestar de los profesionales de la salud se hizo oír. "Los intensivistas del Hospital Central no abandonamos a los pacientes ni a sus familias. Queremos trabajar como lo hicimos siempre, incluso en la pandemia, cuando triplicamos nuestro esfuerzo", dice textual uno de los comunicados de los especialistas compartieron a través de una imagen.  

Sobre el pedido que llevan adelante los profesionales de la salud, la secretaria general de Ampros, Claudia Iturbe, aseguró que se ha presentado una nota ante la Subsecretaría de Trabajo, de manera que sea posible lograr que las partes se sienten a dialogar a fin de llegar a acuerdos justados a las necesidades del sector. Entre los pedidos concretos que lleva adelante el sector, figura la necesidad de que las prestaciones extra que se realizan en el área de las guardias, terapia intensiva y anestesia, se cobre de manera íntegra en el sueldo final que los médicos deben cobrar en blanco.

De lo contrario, asegura Iturbe, el cobro de las prestaciones de manera pactada por sectores relativos a las diferentes especialidades, genera negociaciones que terminan perjudicando a los médicos. Desde el otro lado, el resultado es que el Gobierno se ve sujeto a la amenaza de cortes en los servicios de salud cada vez que no se actualizan los montos de la manera en que lo solicitan los profesionales.

"Lo que necesitamos es poder sentarnos a dialogar de manera que todos los pagos se efectúen en blanco, para que los profesionales puedan tener una continuidad en sus tareas en cada uno de los efectores donde prestan sus servicios. Hoy, nos encontramos con situaciones disparejas e irregulares y eso hace que haya permanentes pases del sistema estatal al privado en función de los pagos que se van ofreciendo de manera aislada", explicó Iturbe.

Pagos escasos e irregulares

Sólo para mencionar un ejemplo, vale decir que en la actualidad, cada prestación extra que los médicos realizan cuesta -según Ampros- 49 mil pesos mensuales que se cobran a través de una factura. En el caso de las guardias que los pediatras y especialistas cubren los fines de semana se pagan 20 mil pesos por 24 horas de labor cumplida, mientras que los días de semana ese trabajo se factura en 19 mil pesos. Sobre ese monto, los profesionales deben restar el pago del monotributo y realizar cada mes una declaración de libre deuda y presentar un certificado de buena conducta; situación que como consecuencia de las demoras en la realización de trámites, lleva a que el pago se logre de manera efectiva de manera muy atrasada. En el medio, al igual que el resto de la población, no queda atrás la lucha por estirar cada centavo para paliar el actual ritmo inflacionario. 

Desde el ministerio de Salud, por su parte, indicaron que se está trabajando para poder acordar una solución junto a los profesionales de la salud.  En ese sentido, la ministra Ana María Nadal se refirió al tema días atrás al decir que como cada año, tras el cierre de los acuerdos paritarios, la cartera de Salud lleva adelante las negociaciones con el sector de los médicos de diferentes especialidades para actualizar los valores de las prestaciones. "Las paritarias están cerradas. A las prestaciones siempre las acordamos después de ese proceso y estamos trabajando en la actualización de los valores de las prestaciones", dijo Nadal y detalló que esta semana el Ministerio emitirá una normativa en la que se detallarán los nuevos montos a pagar por las prestaciones. 

Las áreas críticas, como anestesiología también están en vilo y representan una amenaza para la salud pública. Según destacaron los profesionales, el pago por las prestaciones es el más bajo del país. Pero además, detallaron que en tres años han perdido dos tercios de su poder adquisitivo. "El Gobierno provincial abandona al paciente mendocino al empobrecer a los trabajadores de la salud", se planteó en una de las imágenes que también circuló esta mañana a través de las redes sociales.