Piden que la Patrulla de Rescate no sea responsabilizada por el escándalo de Munives en el Aconcagua
Un pintor que vende sus obras en el Parque Aconcagua envió una carta en la que pide que se comprenda la situación que debieron enfrentar los miembros de la Patrulla de Rescate durante la expedición de Roberto Munives y su pareja.
El pasado 25 de enero, el ahora exjefe de la Policía de Mendoza, Roberto Munives debió dejar su cargo luego de que se hiciera público que realizó una expedición a la cima del Aconcagua con su pareja, quien no cumplía los requerimientos establecidos para hacer la travesía.
Con el pasar de las horas, más datos se fueron revelando como, por ejemplo, de la pareja utilizó un helicóptero del Estado para descender. Tres investigaciones se han abierto tras el escándalo que también lanzó sus esquirlas hacia los miembros de la Patrulla de Rescate del Parque Aconcagua.
La siguiente es una carta que envió un lector de MDZ. Se trata de Miguel Doura quien es pintor y vende sus obras en el Parque Aconcaguar, en su escrito pide que se contemple las circunstancias a las que fueron sometidos los rescatistas y no se los responsabilice por lo ocurrido.
¿Qué nos está pasando?
Hace unos días llegaron con la intención de hacer cumbre en el Cerro Aconcagua el director de la Policía de Mendoza y su pareja, Roberto Munives y Mónica Delsouc. Mónica Delsouc ascendió bajo el lema: “No al cáncer de mamas”.
Esta ascensión fue apoyada desde el campamento base por los miembros de la UPRAM (Unidad de Patrulla de Rescate de Alta Montaña), unidad policial especializada precisamente en la búsqueda y rescate de cualquier andinista en áreas agrestes y de alta montaña, unidad que se ha desplazado en más de una oportunidad de su área de incumbencia (la provincia de Mendoza) al sólo requerimiento de ayuda de otra gobernación.
Esta patrulla tiene sus inicios en los años '80 conformándose como “Unidad” en el año 2007. Desde esta fecha, temporada tras temporada de ascensión, la “PAPA LIMA” (como conocemos a los miembros de la patrulla de rescate los que vivimos en el campamento base “Plaza de Mulas”) viene realizando cientos de salidas de búsqueda y rescate desde los 3.000 m hasta los 6.961 m de altura, hasta la cumbre misma del Aconcagua.
Estas “salidas” o “situaciones de rescate” ocurren frente a un “alerta” o “aviso” de cualquier andinista, por lo general, bajo condiciones climáticas adversas (en este caso “adversas” pueden significar temperaturas de -30 o -40 de sensación térmica y vientos de más de 80 km/h), durante la madrugada o la media noche. Estos “patrullas” saben que muchas veces arriesgan su vida o la posibilidad de un congelamiento irreversible (amputación), pero son rescatistas, saben de su deber y los riesgos que corren. El día 25 de enero del corriente año, se dio a conocer por diferentes medios de comunicación que Mónica Delsouc había subido al Aconcagua sin las vacunas exigidas por el Parque Aconcagua para el ingreso al mismo.
Esta noticia generó el pedido de renuncia del Director de la Policía de Mendoza. Así mismo fueron expuestos públicamente los jefes de la Patrulla de Rescate, Antonio Ibaceta y Ariel Astudillo, como así también otros miembros de esta patrulla, rondando esta “exposición pública” a través de diferentes medios de comunicación con posibles sumarios internos.
El comisario inspector, Antonio Ibaceta, al igual que el actual jefe de la Patrulla Astudillo, tienen más de veinte años salvando y “jugándose la vida” en salvaguarda de andinistas desconocidos que con pericia o impericia ponen en riesgo su vida y la de sus prójimos; seguramente durante estos rescates a nadie se le ocurriría pedir “tal o cual carnet sanitario” antes de colocar una mascarilla de oxígeno o inyectar una dexametazona mientras se “empaqueta” y se empieza a bajar de altura al socorrido antes que un edema pulmonar o cerebral lo haga asfixiar en sus propios fluidos o lo deje parapléjico de por vida, al igual que un guardavidas lo hace en una playa o un bombero en un accidente de tránsito.
Una “voluntad”, “mano anónima” o quizás “interna” ha intentado desprestigiar y hacer responsables a estos “patrullas” del hecho que Mónica Delsouc haya subido al Cerro Aconcagua sin las vacunas exigidas por este Parque.
Yo me pregunto: ¿Es la Patrulla de Rescate el órgano responsable de exigirle a esta señora las vacunas correspondientes?, ¿con “qué cara” le puede pedir un subalterno al jefe de la policía de toda la provincia que le muestre los “papeles de vacunación” de la pareja de este?, ¿por qué se quiere hacer responsables a todos los “patrullas” que estuvieron vinculados a esta ascensión al “Coloso de América”, con mayor o menor responsabilidad de algo que ni siquiera estaban informados?.
Sabía usted que esta unidad de la policía no tiene internet, ni teléfono fijo ni comunicaciones propias (aparte de las propias comunicaciones por “handy”), es decir, que para comunicarse con “el mundo de abajo” necesitan “pedir prestada” una línea.
Escribo estas palabras solo con la intención de tratar de clarificar esta imagen desbordada de amarillismo. Los que nos acercamos cada temporada a Plaza de Mulas, campamento base del Aconcagua, somos parte de una gran comunidad: guardaparques, Papa Limas, médicos, campamenteros, cocineros, porters, guías, asistentes, helicopterístas, militares y hasta pintores como yo. Qué nos está pasando, usemos entre todos el sentido común, busquemos lo que nos une.
No permitamos que algo simple (porque los que vivimos “aquí arriba” sabemos lo que significa algo “serio”, de vida o muerte inminente) y excepcional, como lo ha sido para todos nosotros esta temporada “covid”, nos confunda y las aguas sagradas de este cerro, APU ACONCAGUA sean llevadas hacia molino ajeno.
Miguel Doura/ DNI:14857404