En materia de whisky hay opciones para todos los gustos. Hay desde variantes que se encuentran de moda, como es el caso de la bebida japonesa, hasta otras que nunca pierden su vigencia. En este último grupo se encuentra el whisky de malta, y a continuación compartimos algunas claves que permiten comprender mejor el fenómeno que genera.

Se trata de un verdadero clásico, de una de las opciones preferidas por todas las personas, sean expertos en esta noble bebida alcohólica o bien principiantes.

Whisky de malta: origen y características

La trayectoria del whisky de malta es tan extensa que resulta difícil precisar su origen. Sí se sabe que proviene de la región de Escocia y que hace ya más de 500 años se presenta a través de distintas referencias históricas.

Se dice que el primer registro documentado proviene de un texto del año 1494, en el cual el entonces Rey de Escocia hace una referencia a la que denomina “agua de vida”.

Desde entonces, y con el correr de los siglos, el whisky de malta ha ido creciendo y perfeccionándose, adquiriendo incluso distintas particularidades en cuanto a su elaboración.

La más famosa de todas, a esta altura ya un emblema al hablar del whisky escocés, es la versión de pura malta. También conocido como Single malt whisky, posee la principal característica de que su elaboración se da en una única destilería, y de allí su nombre.

Este whisky de pura malta se obtiene a través de la fermentación de un cereal malteado que, por lo general, es cebada. Además, presentan un envejecimiento que es de al menos 3 años y que se da en barriles de roble.

Whisky de malta: ¿qué tipos existen?

El de pura malta es tan solo una de las variantes que se pueden encontrar cuando se piensa en este tipo de whiskies. Otra de las opciones más famosas es la que se conoce como Blended malt, que no es más que la combinación de dos o más whiskies de pura malta provenientes de distintas destilerías.

También está el Single grain scotch, que es una versión de whisky de malta a la cual se agregan otros cereales en su elaboración.

De esta opción, a su vez, se desprende la variante de Blended grain, que es una mezcla de dos o más Single grain realizadas en distintas destilerías de escocia.

Por último, hay que mencionar la versión más compleja de todas: la Blended scotch whisky. ¿Cuál es la principal característica de ésta? Que para su elaboración se usan uno o más Single scotch en combinación con uno o más Single grain.

Cada una de estas bebidas se destaca por su singularidad, ya sea en aroma, sabor y matices. Todo esto, en parte, también explica por qué el whisky de malta es todo un símbolo de Escocia y, a la vez, uno de los mayores íconos de todo el mundo.