El día en que el Gobierno se arrepintió de iniciar las clases en febrero

Sosteniendo su panza de siete meses de embarazo, una mamá hace notar su pesar después de enterarse que el retorno de los alumnos a las clases en Mendoza para el ciclo lectivo 2022, está programado para el 21 de febrero. La joven ya tiene un pequeño en edad escolar y sabe que en esa fecha no sólo su rutina será más compleja, sino que ya había imaginado unas breves vacaciones en familia junto a su nuevo integrante. "Ahora no sé cómo vamos a hacer, tendremos que cambiar todos los planes", destaca en la puerta de un colegio privado de Ciudad, mientras aguarda la salida de su hijo. 

La voz de los padres ya se hace escuchar con miras a lo que podrían ser los próximos meses en Mendoza. Es que ni bien el nuevo calendario oficial educativo fue dado a conocer, las quejas no dejaron de resonar en las instituciones educativas, que todavía intentan ponerse de pie tras las dificultades planteadas en el marco de la actual pandemia. De acuerdo al cronograma previsto, los docentes serán los primeros en comenzar el 7 de febrero, mientras que el 10 de ese mismo mes, será el turno de los alumnos que deban completar el segundo tramo de acompañamiento para estudiantes con espacios curriculares en proceso. Esta fecha es tanto para los estudiantes de los niveles primario y secundario, de gestión estatal y privada.

El adelanto de clases que nunca fue

Lo cierto es que esta no es la primera vez que el Gobierno decide retomar las clases aún cuando las temperaturas del verano se hacen sentir y de hecho, muchas familias se encuentran aún en "modo vacaciones". En noviembre de 2018, el ex gobernador Alfredo Cornejo anunció junto al entonces director de Escuelas, Jaime Correas, que las clases comenzarían el 6 de febrero, conforme a la meta de llegar a los 190 días de clase. Hoy, el objetivo es cumplir con los 195 días en la escuela.

En ese momento, el anuncio había sido expuesto por Alfredo Cornejo el 27 de noviembre y no tardó en generar un profundo rechazo por parte de docentes, padres y gremios, que entre otros aspectos destacaron el deterioro de los establecimientos, los planes vacacionales de las familias  y la persistencia de las elevadas temperaturas.