Neuropsicología y pandemia

La canción para los abuelos que unió Barcelona y Mendoza

Tres jóvenes en Barcelona, sus abuelos en Mendoza y una canción que logró unirlos. Te contamos la historia.

Cecilia Ortiz jueves, 7 de mayo de 2020 · 07:07 hs
La canción para los abuelos que unió Barcelona y Mendoza
En la foto están los chicos junto a sus papás, Cecilia y Javier y Laia, novia de Tobías.

Hay fenómenos que son ineludibles: un hielo se derrite ante una fuente de calor, todo lo que sube, baja, la distancia separa dos cuerpos, la distancia separa, la distancia.

La distancia nos duele y mucho más ante una situación de crisis, porque nos sentimos vulnerables, porque todo, aún los kilómetros, nos sensibiliza, nos despierta nostalgias. El punto es cómo logramos pararnos frente a la angustia para encontrarle una vuelta constructiva, para que el dolor no nos paralice.

Esta historia comienza así: me llega un video posteado en Instagram. Una canción pegajosa y unos abuelos bailando y cantando a su son. Se llama "Distance". Si les tengo que confesar, me emocionó. Me puse en contacto con los responsables y conocí a tres jóvenes artistas entusiastas, humanos, cálidos y, sobre todo, guiados por valores como el amor, la familia, el estudio y el trabajo por la pasión.

Borja, Tobías y Marc Pizarro Salinas tienen 21, 19 y 16 años, respectivamente. Hace 18 años viven en Barcelona, lugar al que se mudaron sus papás, dejando en esta provincia los afectos de su familia extensa.

Borja se dedica a la música. Comenzó sus estudios de producción musical hace dos años en Barcelona y actualmente los continúa en la UWL (University of West London). Compone y canta “24/7” como dice él, con un españolísimo acento que contagia ritmo y jovialidad.

Tobías cursa su último año de secundaria con orientación en audiovisuales. Es apasionado del cine, carrera que seguirá estudiando el próximo año. Su pasatiempo, desde ya, es ver películas.

Marc está en el penúltimo año de su secundario. Incursionó en el arte y, al igual que su hermano Tobías, piensa dedicarse a audiovisuales y cine.

El director de cine Frank Capra dijo una vez: “una corazonada es la creatividad tratando de decirte algo”. Y seguro que Borja escuchó el llamado, porque tras una sesión de meditación, se descubrió tarareando una melodía que se transformó luego en el estribillo de una canción. El concepto de distancia ancló en su pensamiento y luego amarró la idea de dedicarle una composición a las abuelas. Acto seguido, “empecé a escribir la letra y a grabar las voces”.

Borja cuenta que mientras estaba grabando, entró su hermano Marc y le preguntó qué hacía, le comentó sobre el proyecto y le dijo: “Bah! Ponte a hacer los coros”, así lo hizo y “quedaron super bien”, dicen entre risas.

Tobías se unió con la idea de hacer un video. Surgió la idea de en enviar el estribillo de la canción a gente conocida para que filmaran a sus abuelos bailando o moviéndose.

Los tres cuentan que supusieron que nadie iba a colaborar. De hecho, el primer día no llegó nada. Pero luego “nos enviaron tantos, que no pudimos ponerlos todos”, dicen.

“Lo mejor de todo es que vimos todos los videos de abuelos bailando y cantando y eso te da una piel de gallina, verlos dando la vuelta, alegres, pasándolo bien. La verdad, se nos rompía el corazón.”

“En los estribillos salen compañeros y conocidos nuestros de aquí que tienen sus abuelos allá en Mendoza. Nuestros abuelos están en el video también”. “Nosotros estamos sufriendo la distancia con nuestros abuelos porque llevamos dos años y medio sin verlos. Esperamos que esto pase rápido para que los podamos ver, porque, la verdad, es horrible”.

La edición fue difícil, porque tuvieron que compaginar varios videos y no querían dejar a nadie afuera. 

“El objetivo era hacerle una dedicatoria a los abuelos. Ya que el confinamiento se volvió muy estricto, abuelas y abuelos quedaron aislados. No sé si lo he logrado, pero quería alegrar a mis abuelos y hacerles más ameno el confinamiento. Espero que haya sido así, la verdad”, dice Borja.

La música, la danza, el arte en sí, son formas ancestrales de comunicarnos. Permiten transmitir emociones y sentimientos que van más allá del lenguaje verbal. Tantos artistas que destinaron sus obras a amores prohibidos, ideales perseguidos, angustias calladas, lo supieron.

Creo que sin ser demasiado concientes, los tres han podido relativizar la distancia. Cada nota, cada ritmo, cada voltereta de pies de cuarentena han podido acercar a muchos nietos con sus abuelos.

“No sé si lo he logrado”, dice Borja. Sí, querido, seguro que sí.

Lic. Cecilia C. Ortiz / Neuropsicóloga / licceciortizm@gmail.com

Letra de "Distancia" (traducción)

“Esto es para todas las abuelas que extrañan a sus nietos.

¡Las tenemos!

Necesitamos distancia. 24/7 preguntándonos por qué

Necesitamos distancia.

Maldición abuelas, porque las amamos

y nos preocupamos por ustedes

necesitamos distancia. 24/7 preguntándonos por qué

necesitamos distancia.

Maldición abuelas, porque las amamos

y nos preocupamos por ustedes.

Todo lo que quiero es volver hacia atrás,

estar con mi abuela, buenas vibras en vacaciones.

Puedo recordar la última vez

que te vi en esa estación diciéndome adiós.

Sólo lo podremos hacer si verdaderamente nos ocupamos

Le podremos enseñar a alguien lo que debe hacer

para cuidarse, y ser compasivos.

Tenemos que pelear, ganar este juego,

pero la gente debe quedarse en casa y estar seguros. 

Necesitamos distancia. 24/7 preguntándonos por qué

Necesitamos distancia.

Maldición abuelas, porque las amamos

y nos preocupamos por ustedes”.

“Para nuestros abuelos. No podemos esperar para verlos”

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