Juan Carlos Guerrero: "A Norma Carleti primero la quisieron envenenar"

Juan Carlos Guerrero está detenido en la cárcel de Boulogne Sur Mer, acusado de haber participado del crimen de Norma Carleti. El albañil, que frecuentemente hacía trabajos en la casa de la víctima y de Leonardo Hisa, habló con MDZ y dio su versión sobre lo que ocurrió.

Para él, el crimen de Norma Carleti estuvo planificado y fue ejecutado por “sicarios”. Sin embargo, asegura que el plan original era envenenarla con un método más sofisticado: poner una sustancia tóxica en el tanque de agua. “El veneno aún debe estar en la casa de Hisa”, aseguró.

Norma Carleti era empresaria y fue asesinada brutalmente el 5 de marzo del año pasado. El crimen generó un fuerte estupor por quién era la víctima, por quiénes quedaron señalados como acusados (su ex esposo Leonardo Hisa) y por la brutalidad del crimen: la mataron de más de 50 puñaladas.

La hipótesis de la Fiscalía es que quien planeó el crimen fue Leonardo Hisa y para ello contrató “los servicios” de la familia Guerrero. Allí, Juan Carlos sería el nexo entre el ex legislador radical y quienes ejecutaron el crimen: entre ellos, dos de sus hijos.

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Guerrero está detenido en el pabellón 5 de la cárcel más antigua de Mendoza. Antes había estado preso en Tunuyán. Accedió a ser entrevistado y pudo hablar, como una reja de por medio. La entrevista duró casi 20 minutos, y allí el acusado dio detalles del supuesto plan para asesinar a Carleti, además de denunciar que recibió amenazas y ofrecimientos de dinero para declarar de una manera parcial en la causa. El mismo acusado se ofreció como “arrepentido” en la causa, pero ese pedido fue rechazado.

La versión que Guerrero da del crimen es que Leonardo Hisa, que está detenido, fue efectivamente el autor intelectual del homicidio de su ex pareja. Pero además involucró a más personas en el plan. “Entre él y dos primos de él planearon la muerte”, aseguró.

El relato, que por momentos tiene contradicciones, indica que el plan original era matarla en otro momento, y con otro método. “Las fechas no son muy específicas, pero se fue planeando tres meses antes del hecho. Se iba a hacer el día que se casó el hijo de él. Por eso lo hizo tan lejos, para que todos estuviéramos afectados al casamiento y que no hubiera dudas para que lo pudieran implicar. Pero se encontraron con la sorpresa de que Norma Carleti había viajado”, dijo el acusado.

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Por eso, asegura, la forma de ejecutar el homicidio cambió. “La querían envenenar. Un primo de él trajo el veneno, que yo estoy seguro que está todavía en la casa. Él la quería envenenar. Quería envenenar el tanque de agua con un veneno muy fuerte, muy poderoso. Pero Emiliano Campos (actual diputado provincial) le dijo que no se haga problema que había contratado dos sicarios que son muy buenos. Sé que esos sicarios se contrataron en la feria, sé que se pagaron muchos montos de dinero”, relató.

Guerrero asegura que fue testigo involuntario del armado del supuesto plan, y que desde entonces su vida cambió porque lo amenazaron y le ofrecieron hasta 5 millones de pesos para que callara o declarara de otra forma en la justicia. “Desde el momento que escuché, ellos me afectaron al hecho. Empezaron las amenazas. Mi silencio iba a ser gratificado. Y si yo algún día llegaba a hablar me amenazaban con lo que más protejo que son mis hijas”, dijo. Además, aseguró ser testigo de los pagos. “Yo era el chofer de Leonardo. Y sé que llevó mucha plata. Se hicieron pagos en la Feria de Guaymallén. Bajamos por Arístides, doblamos media cuadra, en un edificio se hizo otro pago grande. Ese pago lo hizo Hisa. La contratación fue por parte de Campos, pero los pagos los hacía Hisa”, aseguró.