Cambios de gabinete

Tres desafíos urgentes para Lacunza como jefe de Hacienda

El nuevo Ministro tendrá desafíos urgentes a su cargo. Tres claves y qué piensa. 

sábado, 17 de agosto de 2019 · 23:50 hs

Hernán Lacunza asumirá la conducción de la política económica argentina en un momento de crisis y tiene por delante varios desafíos clave cuyo éxito no depende de él.

  • El tiempo. Lacunza hereda una cartera caliente y con poco tiempo por delante. El Gobierno viene de una derrota electoral "simbólica" que generó devaluación e incertidumbre. Por delante está la elección general y en le medio una convivencia política en construcción entre el Gobierno y quienes hoy están en la oposición. El tiempo es un factor clave: deben calibrar la ansiedad de los mercados, las necesidades de la población y las urgencias políticas del Gobierno.
  • El acuerdo con el Fondo. La crisis generada tras las PASO y sus consecuencias en la economía real preocupan. Pero también las repercusiones que pueden tener las medidas adoptadas por el Gobierno para amortiguar los problemas en la población. El aumento en el gasto público y la baja en los ingresos que significarán la catarata de medidas adoptadas la semana pasada significan una virtual ruptura del acuerdo con el FMI, a poco de que llegue otro desembolso. Lacunza tendrá a su cargo cómo enfrentar un enlace para retomar el diálogo y, llegado el caso, renegociar también en el corto plazo con el Fondo.
  • La economía real. A pesar de las medidas para amortiguar los impactos de la devaluación, es probable que la inflación de agosto y los meses siguientes se dispare. Lacunza tendrá allí el principal desafío, pues es el tema donde más se notó el fracaso de la política económica del gobierno durante los tres años.

Qué piensa

Lacunza era uno de los principales defensores de la política llevada adelante por María Eugenia Vidal en Buenos Aires, cuestión que no siempre estuvo en perfecta sintonía con el Gobierno nacional. 

Encaró reformas, como la reducción de algunos impuestos provinciales y también tomó medidas para amortiguar el impacto de la suba de tarifas. 

En primera persona

Lacunza tiene una vida activa en redes sociales y medios. Fue columnista del diario La Nación y allí planteó muchas de sus sensaciones sobre la realidad. 

Acá, un extracto de su última columna para ese medio. 

No iremos a dormir una noche como adolescentes y amaneceremos como adultos sorprendidos frente al espejo. El camino al desarrollo es parsimonioso. Los atajos populistas hipotecan futuro para comprar presente a tasas usurarias. Sueños efímeros y circulares. A veces anestesiados por tarifas ficticias, dólar reprimido por cepos o estadísticas miserables para esconder a los pobres. Pero terminan cuando, implacable, el sol corre el velo de la ficción.

Hace cuatro años propusimos un camino distinto al de las décadas previas. Como todo gobierno, algunas cosas salieron bien; otras, más o menos; otras, mal. Las obras están a la vista. La inflación, también. Pero hay cosas menos atractivas para los titulares habituales, pero no menos importantes, porque el cambio esencial puede ser invisible a los ojos.