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Cuatro conclusiones exprés sobre el primer ensayo electoral

Los intendentes del PJ refrescan algo de su poder. Cambia Mendoza se consolida como "fenómeno urbano". El fracaso de las aventuras políticas. 

lunes, 29 de abril de 2019 · 01:47 hs

Las elecciones primarias en San Martín, Tunuyán, Lavalle y San Rafael fueron un ensayo electoral que puede servir de probeta para que cada fuerza política revise la estrategia electoral que tiene. Aunque, claro, no puede traspolarse automáticamente porque se trató de elecciones comunales anticipadas, con una fuerte impronta localista. Justamenente en los comicios provinciales y nacionales podría ser más complicado mantener esa agenda. 

Uno. La estrategia de superviviencia de los intendentes del PJ fue exitosa, al menos en el corto plazo. Ese plan de acción tenía un plano judicial y otro político. Primero adelantaron las elecciones para bloquear el límite de las reelecciones impuesto por Cornejo a través de la promulgación de la enmienda del artículo 198 de la Constitución. Esa estrategia fue calculada con el calendario en la mano. Primero presentaron un recurso de inconstitucionalidad. Luego llamaron a elecciones. Y con lo justo presentaron una cautelar. A la Corte casi “no le quedó otra” que avalar la cautelar hasta que se resuelva la causa de fondo. Llegó la elección y el Tribunal aún no resuelve.

Los cuatro intendentes fueron, junto con Alejandro Bermejo, los “sobrevivientes” de lo ocurrido en 2015 y ahora vuelven a pararse cómodos en la puja interna del PJ. Salvo Giménez, que tiene una incógnita que resolver: ganó con un resultado apretado y los 20 puntos de su rival interno le marcan una discordia por calmar si quiere ser reelecto.

Dos. Cambia Mendoza chocó con sus limitaciones. Las mismas que tuvo en 2015. Pensaban "ir por todo" a finales del año pasado, tomando como instrumento también el límite a la reelección de los intendentes. Pero debieron recalcular para tener pretensiones más humildes por la forzada candidatura de los 4 intendentes y también la crisis.

En San Rafael, estuvieron lejos y el resultado parece definitivo, aunque falta mucho. En San Martín sí estuvieron cerca, aunque más por carencias ajenas que por virtudes propias. Rufeil es un buen candidato, pero lo más sorprendente fue el mal desempeño de Gimenez y el buen resultado de su rival interno. En el oficialismo provincial aseguran que los votos de Etem “no son peronistas sino opositores”. Aunque es una interpretación forzada (porque quienes lo votaron sí eligieron al PJ como frente), nada indica que en las generales los que votaron contra Gimenez lo hagan en septiembre. En Tunuyán, no tenían casi expectativas y en Lavalle festejaron el piso que superó el 35%. Como sea, por ahora Cambia Mendoza es un fenómeno urbano radicado en el Gran Mendoza, al que le cuesta expandirse y ganar en “el interior”.

Tres. Los intendente recontrareelectos vuelven a legitimarse en las urnas y meten presión política tácita antes de que la Suprema Corte falle si es legal el límite a las reelecciones. La Corte, que nuevamente fue tiempista y especuló más con los movimientos políticos que con la necesidad de justicia, deberá tomar distancia y dictar sentencia. Ese será un antes y un después y quizá la principal consecuencia de un proceso electoral marcado más por la previa que por la elección en sí. Es que de las PASO de hoy saldrán algunos candidatos, pero puede quedar como herencia una enmienda de la Constitución y una puerta abierta a una reforma más profunda. 

Cuatro. Las elecciones de ayer demostraron que las aventuras electorales duran poco cuando no tienen sustento. Es lo que le pasó al partido Protectora, que presentó candidatos en los cuatro departamentos y tuvo un mal resultado. Ninguno logró pasar el piso del 3% y por lo tanto ese partido no competirá en las generales departamentales de septiembre. Si se tiene en cuenta que esa fuerza política, bajo el paraguas del PI, había salido tercera en las elecciones de 2017, el resultado es peor. Una de las claves puede estar en la falta de volumen político y en que esta vez no tenían a una figura que traccionara, como lo fue José Ramón hace dos años. El magro resultado del FIT, que tuvo mucho menos peso que en otras elecciones, también es un dato saliente y puede ser una señal de una futura elección polarizada en Mendoza. Otras aventuras electorales, como la del Frente Renovador en San Rafael, quedaron en un mero intento.