Cinco gobernadores negocian una alianza legislativa que amenaza con diluir el peso del peronismo en el Congreso
En una maniobra que amenaza la fortaleza del peronismo en el Congreso, Osvaldo Jaldo, Gustavo Sáenz, Raúl Jalil, Rolando Figueroa y Hugo Passalacqua podrían confluir en un frente unificado, tanto en Diputados como en el Senado.
Los gobernadores Osvaldo Jaldo, Gustavo Sáenz, Raúl Jalil, Rolando Figueroa y Hugo Passalacqua negocian un frente legislativo unificado en el Congreso.
Montaje MDZUn grupo de cinco gobernadores que nuclea a peronistas y partidos provinciales analiza conformar un frente unificado en el Congreso para despegarse de la oposición dura que responde a Cristina Fernández de Kirchner y acompañar las reformas de Javier Milei, mientras negocian obras y recursos para sus provincias. Tambalea el peronismo kirchnerista en el Congreso, que podría quedar aún más diluido entre múltiples espacios dialoguistas con la Casa Rosada.
Los gobernadores que amenazan la influencia del kirchnerismo en el Congreso
Se trata de los peronistas Osvaldo Jaldo (Tucumán), Gustavo Sáenz (Salta) y Raúl Jalil (Catamarca), junto con los gobernadores que responden a partidos provinciales como Hugo Passalacqua (Misiones) y Rolando 'Rolo' Figueroa (Neuquén). El formato, que podría ser el de un bloque unificado o un interbloque, aún no está definido, pero el nuevo espacio podría aportar entre 25 y 30 bancas entre la Cámara de Diputados y el Senado a la causa de Javier Milei en próximas votaciones clave.
Te Podría Interesar
La versión trascendió antes de la reunión que protagonizó este jueves por la mañana Sáenz con el jefe de Gabinete, Manuel Adorni, y el ministro del Interior, Diego Santilli, que ya recibió a Jalil la semana pasada, esta tarde recibirá a Jaldo y luego viajará el sábado a Neuquén para reunirse con Figueroa. Todo esto en el marco de la cruzada del flamante funcionario para verse con los 20 gobernadores que se sentaron con Javier Milei en la Casa Rosada dos semanas atrás y manifestaron su apoyo a que el Gobierno tenga su Ley de Presupuesto, además de las reformas laboral, tributaria y del Código Penal.
De ese populoso encuentro también participó el santiagueño Gerardo Zamora, que también fue invitado a participar del espacio de gobernadores, pero decidió no cortar lazos con el peronismo kirchnerista. De origen radical, hoy Zamora comulga con el kirchnerismo pero con marcados rasgos de independencia, lo cual explica sus conversaciones con el Gobierno.
El gobernador de Salta, Gustavo Sáenz, el jefe de Gabinete, Manuel Adorni, y el ministro del Interior, Diego Santilli, se reunieron en Casa Rosada este jueves. Luego llegará Osvaldo Jaldo.
Un escenario favorable para Javier Milei
En la Cámara de Diputados, el oficialismo sabe que contará con una bancada que rondará los 100 diputados entre los propios y los del PRO, que mantendrá su identidad en el recinto pero acompañará las medidas que el Gobierno impulsará en las extraordinarias como lo viene haciendo mayoritariamente, salvo algunas contadas excepciones.
Con ellos dialogará la bancada radical, armado de Provincias Unidas, con los legisladores que entraron al Congreso bajo el ala de los gobernadores Martín Llaryora (Córdoba), Ignacio Torres (Chubut), Carlos Sadir (Jujuy), Gustavo Valdés (Corrientes), Maximiliano Pullaro (Santa Fe) y Claudio Vidal (Santa Cruz), y este otro nuevo bloque federal en el que trabajan los mencionados cinco mandatarios.
Todo esto diluye la posición de Unión por la Patria, que viene de perder dos diputados del Justicialismo de San Luis y hoy rondaría las 96 bancas. Sin embargo, eso podría caer aún más si Jalil y Zamora llegaran a oficializar una ruptura. El tucumano Jaldo ya lo hizo el año pasado, cuando separó a sus legisladores del bloque de Unión por la Patria para lanzar su bancada Independencia.
De concretarse el nuevo bloque de gobernadores, a la Casa Rosada le resultará aún más sencillo alcanzar la mayoría necesaria de 129 diputados y 37 senadores para avanzar con sus reformas, mientras que el peronismo queda cada vez más lejos del poder de bloqueo del que hizo gala junto a otros actores de la oposición en la previa electoral.


