Cábala ganadora, sin militancia e insultos a Macri: las intimidades del búnker libertario

El Gobierno celebró con euforia el triunfo obtenido este domingo en las elecciones legislativas de la Ciudad, siendo el único comicio que realmente interesaba en la Casa Rosada, tras varios magros resultados en otras provincias.

Para los alfiles libertarios, el resto de las elecciones tenía "un fuerte contenido local", por lo que no tenía sentido motorizar demasiado despliegue en territorios en los cuales La Libertad Avanza casi no tenía estructura partidaria.

Sin embargo, desde el primer momento la contienda porteña se llevó la atención de todo el armado oficialista, que la consideraba un plebiscito a la gestión nacional. Por esa razón, se pensó en el vocero Manuel Adorni como candidato y es el motivo por el cual se nacionalizó toda la campaña, algo que nunca se dejó de reconocer.

Ante ese nivel de importancia, toda la plana mayor del Ejecutivo tomó este domingo con los mismos preparativos que en aquella victoria del 2023, que lo llevó a Javier Milei a la presidencia. Tras suspender su viaje al Vaticano, el líder libertario concurrió a la sede de la UTN, en el barrio de Almagro, tal cual ocurrió hace dos años, para emitir su voto, en medio de centenares de personas que lo rodeaban, reflejando la misma postal que en aquella mañana de octubre.

Para no alterar nada de ese "épico domingo" se eligió como búnker el Hotel Libertador, donde los Milei vivieron durante meses, incluso en las primeras semanas de haber asumido en el poder. El presidente arribó pasadas las 18 y se quedó hasta las 20.30 en el piso 21, sector del establecimiento que usó durante toda su estadía previo a llegar al Gobierno.

"Javier es muy cabulero, como buen bilardista", sintetizaba, entre risas, un colaborador del mandatario, en diálogo con MDZ en el hotel.

En medio de una feroz interna puertas adentro, este domingo se vivió una marcada tregua en las diferencias que tienen Karina Milei y Santiago Caputo, quienes, el miércoles, en el cierre de campaña, llevaron dos columnas con militantes por separado, incluso con colores e insignias distintas. A ese contento se le sumó los cuestionamientos internos por los supuestos militantes rentados y la foto en Plaza de Mayo del armador y karinista Sebastián Pareja, que ignoró a los referentes que forman parte de las "Fuerzas del Cielo", la agrupación que comanda el asesor presidencial.

Para dejar de visibilizar el conflicto, no se convocó orgánicamente a la militancia. Dentro del salón se encontraban alrededor de 250 personas. En su mayoría eran dirigentes de distintas órbitas del Estado y algunos exponentes del partido. En tanto, fuera del hotel había cerca de 150 personas, casi ninguno con referencias a alguna de las corrientes libertarias. Se instó por la unidad, y lo lograron, al menos públicamente.

De todas formas, ese puñado de simpatizantes, por momentos fogoneados por los mismos dirigentes e influencers, se hizo notar cuando gritaron con algarabía insultos a Mauricio Macri, cántico que fue avalado por una parte de la tropa gubernamental que alentaba a los presentes.

Con este resultado, el Gobierno espera la rendición del PRO. Afirman que es cuestión de días que aquellos macristas que especulaban con el pase a La Libertad Avanza, darán el salto. Hay quienes creen en Balcarce 50 que habrá un conjunto de dirigentes que no esperarán a una posible convergencia electoral entre partidos en la Provincia de Buenos Aires y se sumarán a las filas libertarias.