El avión venezolano-iraní dejó la Argentina y voló a Estados Unidos

En la madrugada de este lunes, el avión venezolano-iraní, retenido desde el 8 de junio de 2022 en Ezeiza, partió rumbo a los Estados Unidos. El Boeing 747-300 matrícula YV3531 de la aerolínea venezolana Emtrasur, secuestrado en el Aeropuerto Internacional, fue retirado del país mientras Venezuela reclamaba que le sea devuelto. El decomiso había sido pedido por la Justicia y el Gobierno de Estados Unidos, en base a la transferencia irregular por parte de la aerolínea iraní Mahan Air a Emtrasur.

El avión despegó alrededor de la una de la madrugada, del Aeropuerto Internacional de Ezeiza, y sobrevoló el territorio argentino para luego hacerlo sobre Chile, Perú, Ecuador y Colombia, con rumbo hacia el norte.

La aeronave de carga, fabricada en Estados Unidos, fue comprada por Venezuela a la iraní Mahan Air y llegó a la Argentina transportando autopartes de Volkswagen. Desde los Estados Unidos sostienen que la venta de Mahan Air a la empresa venezolana Conviasa violó el embargo dispuesto contra esa aerolínea en Irán, por lo que solicitó su decomiso.

La situación se agravó entre febrero y mayo de 2022, porque la empresa venezolana permitió que el avión viajara desde Caracas a Teherán y Moscú.

La aeronave llegó a Buenos Aires el 6 de junio de 2022 con una carga de autopartes de SAS Automotriz, una firma que comercializa asientos y panel de instrumentos para Volkswagen. El 8 de junio, dos días luego de su llegada el avión quiso volar a Uruguay para cargar combustible pero el Gobierno de ese país le impidió aterrizar. 

Frente a esa situación, la Justicia argentina retuvo a la tripulación de la nave, integrada por 15 venezolanos y cuatro iraníes, pero todos fueron liberados con falta de mérito al no encontrarse culpables de ningún delito. 

Por su parte, el pasado 29 de diciembre el juez federal Federico Villena ordenó el decomiso definitivo del avión iraní de Emtrasur, luego de que haya sido protagonista de un confuso episodio, en donde un diplomático de la Embajada de Venezuela llegó hasta la aeronave retenida en Ezeiza. 

El hombre, identificado como José Jesús Jatar Díaz, ingresó al aeropuerto internacional de Ezeiza y se dirigió hasta una zona restringida donde está el avión. En ese lugar, sacó varias fotos de la aeronave con su teléfono celular hasta que fue sorprendido por efectivos de la PSA. Por ese episodio, se inició una investigación judicial.

La PSA destacó que Jatar Díaz estaba acompañado por un empleado de la ANAC (Administración Nacional de Aviación Civi), que le habría dado acceso al área restringida. 

La Justicia ya pidió varias pruebas para saber cómo entró el diplomático al aeropuerto, por dónde ingresó y quien lo autorizó. También se pidieron las cámaras de seguridad del aeropuerto como en otros episodios que ocurren dentro de la terminal.

La aeronave estuvo más de un año bajo custodia del Servicio de Alguaciles de los Estados Unidos, quienes realizaron inspecciones meca´nicas y de los lugares de almacenamiento. Todas las tareas de mantenimiento quedaron a cargo de la empresa Risk Mondial, Aviation & Recovery. En los últimos meses, el avión se puso en movimiento más de una vez.