Ir por todo

Javier Milei sigue sacudiendo el árbol de la política mientras el kirchnerismo "no la ve"

Imitando algunas actitudes del kirchnerismo cristinista, en el Gobierno de Javier Milei cree que es imprescindible "ir por todo" en esta etapa de "luna de miel". Alarma la descoordinación oficial.

Alejandro Cancelare
Alejandro Cancelare jueves, 11 de enero de 2024 · 10:01 hs
Javier Milei sigue sacudiendo el árbol de la política mientras el kirchnerismo "no la ve"
Foto: Twitter Claudio Vidal

Javier Milei ya tiene halcones y palomas en su Gabinete. Mudos y expresivos. Pero, además, alimenta el recelo entre los que "tienen firma y los que no", como asesores "ad honorem" del nivel de Federico Sturzenegger o Santiago Caputo, encargado de la matricería del relato anarco libertario.

Insólito, ayer uno de los elementos informativos brindados a la prensa fue la reunión que encabezó el secretario de Prensa y Comunicación de la Presidencia, Eduardo Serenellini con el resto de los voceros ministeriales y el Presidencial Manuel Adorni, a quienes ya empiezan a apuntar por sus insulsas y carentes de sentidos conferencias diarias. A diferencia de la provocación política brindada por algunos informales antecesores como Carlos Corach o Aníbal Fernández, Adorni empieza a semejarse más a las esporádicas apariciones de Jorge "Coqui" Capitanich o, en los útlimos tiempos, Gabriela Cerutti. 

Sin embargo, el debate que se dio ayer en dos comisiones de Senado de la Nación sobre la aprobación de una boleta única en papel, de manera similar a la que se utiliza en Córdoba, es una de las propuestas más “revolucionarias” de Javier Milei, que entiende que al país hay que “darlo vuelta como una media” y que sabe que para lograr su objetivo debe hacerlo lo más rápido posible.

El peronismo kirchnerista renovador, a diferencia de lo que ha venido haciendo con declaraciones grandilocuentes y amenazas de resistencia civil, a las que se sumaron los dirigentes de la CGT lanzando el paro nacional más rápido de la historia dentro de dos semanas, ahora mejoró su táctica obstruccionista y se sumó a un proyecto de último momento presentado por la rionegrina Mónica Silva, aliada al gobernador k Alberto Weretilnek, el cual propone también una lista única en papel pero con otro formato, similar al que se utiliza en Santa Fe.

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¿Son tan grandes las diferencias como para que existieran dos dictámenes? No. Lo fundamental para el peronismo kirchnerista renovador es que directamente no haya ley, ya que si se hubiese tratado solo el cordobés, que ya tenía media sanción de la Cámara de Diputados, el proyecto hubiera sido ley la semana próxima.

En las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Justicia y Asuntos Penales quedaron los votos empatados y desempató Edgardo Kueider, presidente de asuntos constitucionales. La diferencia entre el actual sistema sábana y la Boleta Única Papel es impresionante. Más allá de cuál beneficia a los partidos políticos y cuál a los candidatos en sí, cualquiera de los proyectos, cordobés o santafesino, cambian el paradigma electoral. Entonces, para que todo siga como hasta ahora, Unión por la Patria pretende que se vuelva a debatir en la Cámara Baja y seguir demorando los cambios.

Sobre este virtual status quo se basa Javier Milei con su retórica anti política, proponiendo temas máximos y elevando lemas como “no la ven”. La sociedad mantiene el deseo de “que le vaya bien” y en la mayoría de sus votantes sigue existiendo el lema “que lo dejen hacer… hace un mes que subió y ya quieren que arregle todo”.

Entonces, cuando los legisladores nacionales que deben tratar el proyecto de ley ómnibus y el DNU piden algún tipo de mecanismo para depurar lo importante de lo accesorio, que el mensaje oficial siga siendo “todo es prioritario”, tiene que ver con eso. La necesidad de instalar, mientras el oficialismo tenga espalda ante la opinión pública, todos los debates posibles, sabiendo que la inflación en los alimentos y las tarifas son elementos que, más temprano que tarde, comenzarán a hacer mella en la valoración de la población.

En la discusión de la Boleta Única en Papel observado en el Senado hasta el radicalismo, al cual Javier Milei detesta porque lo entiende como el que inició el estatismo argentino, una fase anterior al peronismo, en esta oportunidad demostró que está dispuesto a ejecutar cambios si los mismos contribuyen a transparentar los sistemas electorales, como este proyecto, o económicos, pero siempre prefieren que todo se haga sin exabruptos ni prepotencia.

“El contexto legislativo nos permite señalar la necesidad de profundizar en las modificaciones y aportar mejoras a la redacción y técnica legislativa en un futuro cercano, en oportunidad del tratamiento de las reformas electorales propuestas por el Poder Ejecutivo Nacional en la denominada ley ómnibus, que se encuentran actualmente para su tratamiento en la Cámara de Diputados”, dijo el senador Maximiliano Abad.

Boleta Única en Papel, desregulación de la economía, readecuación y reformas laborales sin afectar los derechos preexistentes de los actuales trabajadores, el orden en la vía pública, el combate a los piqueteros y al narcotráfico y un alineamiento liso y llano en favor de las democracias internacionales frente a los atropellos rusos o chinos en los derechos humanos como Venezuela o el respaldo al presidente de Ecuador Daniel Noboa son bases fundamentales que Milei usa y expone para mantener viva la llama del cambio mientras tratan de domar las variantes económicas.

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