El golpe fatal que Cristina Fernández de Kirchner quiere asestarle a Mauricio Macri

El expresidente Mauricio Macri está a un paso de ser procesado en la causa que investiga el presunto espionaje ilegal a los familiares de las víctimas del hundimiento del ARA San Juan, aunque en su entorno creen muy poco probable que el juez Martín Bava se anime a meterlo preso, una imagen sin dudas muy deseada por Cristina Fernández de Kirchner y su círculo más cercano. De hecho, sabiendo que la cárcel es una posibilidad remota, la vicepresidenta busca asestarle al líder del PRO otro golpe quizás más peligroso y doloroso: el patrimonio familiar.

Macri está siendo investigado en la Justicia Federal de Dolores por supuestamente haber ordenado a la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) realizar tareas de espionaje a los familiares de las víctimas del submarino desaparecido en noviembre de 2017. El juez subrogante Martín Bava, que reemplaza momentáneamente a Alejo Ramos Padilla, ordenó la semana pasada indagar al expresidente y le prohibió salir del país (pese a que en ese entonces se encontraba en Estados Unidos) bajo amenaza de arrestarlo. Sin embargo, Macri regresó y aseguró que se presentará mañana en el despacho de Bava y le extenderá un escrito como descargo.

"En el entorno de Macri no creen que Martín Bava se anime a meterlo preso. Incluso fuentes judiciales aseguran que Bava es una especie de 'procesador compulsivo', y es cantado que procesará a Macri en esta causa diga lo que diga", explicó anoche el periodista Luis Gasulla en el programa +Voces, del canal LN+, sobre el futuro del exmandatario en esa causa.

No son pocos los que ven que detrás de esa indagatoria y posible procesamiento se mueve un engranaje judicial propiciado por el kirchnerismo. "El interés principal de Cristina Fernández de Kirchner en materia judicial son las causas propias y meter en la discusión pública las investigaciones contra Macri para equilibrar", analizó Francisco Olivera. En eso coincidió su colega Pablo Rossi: "El interés de Cristina no es demostrar su inocencia, sino tratar de demostrar que todos son corruptos y chorros".

Más allá de esas intenciones que pueden terminar en el plano de los discursivo, la vicepresidenta entiende que el daño contra su principal rival político no es jurídico, sino económico. Y para eso ya tiene un plan en la mira: la causa Correo Argentino. "Cristina y Carlos Zannini buscan la quiebra de todas las empresas de la familia Macri, como Socma y Sideco", advirtió Gasulla.