Coronavirus en Mendoza

Rodolfo Suarez calibra la estrategia sanitaria para no cerrar la economía

El Gobernador mantiene las normas del distanciamiento y la apertura económica. La suba de contagios no marcó una nueva tendencia por ahora, pero siguen de cerca el tema. Aumenta la presión política.

Pablo Icardi
Pablo Icardi miércoles, 15 de julio de 2020 · 22:17 hs
Rodolfo Suarez calibra la estrategia sanitaria para no cerrar la economía

Los gobernadores de Mendoza tienen un tablero de comando que marca los principales indicadores que pueden generar alertas. En el caso de Rodolfo Suarez hay un tema que parece excluyente: la cantidad de casos de coronavirus y la situación epidemiológica; las camas ocupadas, los recursos disponibles y cuánta plata más se puede derivar de otros fines para enfrentar la pandemia. Ese es el "hoy". Pero hay otros indicadores que se derivan de la pandemia que tienen mayor delay en aparecer, pero serán más duraderos: la desocupación, un aumento de la pobreza y empresas que se van a caer.

Por eso ahora el Gobernador está en un momento decisivo: con el invierno y la dispersión de contagios va a llegar el pico de casos de Covid-19. Y Suarez busca calibrar la estrategia para no cerrar la economía como ocurrió al principio de la cuarentena. En el medio, hay presiones legítimas, intereses políticos y caminos enlodados que complican la situación. "Estamos aguantando la economía todo lo que se pueda", explicaron desde Casa de Gobierno.

En Mendoza hay algún leve repunte, aunque siempre en el marco de indicadores "bajo cero". "Vamos a tratar de que cierren la menor cantidad de empresas posibles", reconocen con resignación. Por eso por ahora evalúan ajustes en la estrategia, pero no un retroceso intempestivo. Como ocurrió hasta ahora, en un principio podrían apuntar a que no haya reuniones grupales, pero no restringir actividades económicas. 

La intención es sostener la estrategia tomada en el marco del aislamiento social mientras "el sistema de salud responda" y aún puedan llegar a todos los nexos de los contagiados. El trabajo logístico es descomunal y cada vez más difícil de abarcar. 

En Mendoza se han diagnosticado 363 casos de Covid-19, la enfermedad que mantiene al mundo conmocionado. Actualmente hay 225 personas internadas por el virus, la mayoría de ellas en estado clínico bueno.  

Cuál es la tendencia

Ayer, como adelantó MDZ, se generó una situación tensa pero que requería una perspectiva mayor. La duda era si la subida abrupta de casos era una tendencia o una situación extraordinaria. Por eso no hubo decisiones precipitadas. Hoy la cantidad bajó como esperaban. Sin embargo aparecieron señales de alerta por el aumento de contagios "institucionales" y la repercusión que eso tiene. Ya hay decenas de médicos y enfermeros contagiados y aislados por prevención. Ahora se sumaron las fuerzas de seguridad.

Con solo 5 casos, hay otros 60 policías fuera de servicio por aislamiento preventivo. La repercusión de los contagios en esos ámbitos preocupa porque se trata de trabajadores irremplazables. Un policía solo lo puede reemplazar un par, lo mismo que los médicos y enfermeros. 

Hubo reuniones de todo tipo tras el pico de casos de ayer. El Gobernador convocó a los intendentes más cercanos durante la noche y volvió a hablar a lo largo del día. Mientras, el intendente de Malargüe Juan Manuel Ojeda cedió a las presiones y frenó el turismo interno en el lugar. El peronista Roberto Righi, de Lavalle, reclamó que esa medida se extienda como parte de la presión de un sector de la oposición que reclama que Mendoza retroceda. 

Si hay alguna medida, no será generalizada. La Ciudad de Buenos Aires marca un nuevo norte: propuso romper el esquema rígido de "cinco fases" que planteó el Gobierno nacional y estipula 12 etapas. La última de ellas parece utópica, pues plantea el fin de las restricciones. En segundo plano está por ahora cuándo volverán efectivamente las clases presenciales en Mendoza, que quedó afuera por ahora del lote de 9 distritos que arrancarían, con muchas restricciones, en agosto. 

Nadie espera una sorpresa porque no hubo señales en ese sentido, pero la Nación aún puede tomar un criterio distinto para Mendoza si la situación epidemiológica cambia. Alberto Fernández decretó que Mendoza estaba en Distanciamiento Social hasta el 17 de julio, es decir hasta el viernes. Lo mismo ocurría, en sentido contrario, para el AMBA, que cerró todo hasta la misma fecha. Suarez decretó la continuidad de la situación actual hasta el próximo lunes. Pero será el Presidente quien marque las directrices cuando hable mañana. 

Las condiciones formales para que no haya cambios estructurales son tres:

  1. El sistema de salud debe contar con capacidad suficiente y adecuada para dar respuesta a la demanda sanitaria.

  2. El aglomerado urbano, departamento o partido no debe estar definido por la autoridad sanitaria nacional como aquellos que poseen “transmisión comunitaria” sostenida del virus SARS-CoV-2.

  3. El tiempo de duplicación de casos confirmados de Covid-19 no debe ser inferior a QUINCE (15) días. No será necesario cumplimentar este requisito si, por la escasa o nula cantidad de casos, no puede realizarse el mencionado cálculo.

 

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