González García: "El pico sería durante la segunda quincena de abril"

El ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, aseguró este sábado, en una entrevista brindada a Radio Mitre, que "la cuarentena se lleva adelante bien y consideró importante hacer un esfuerzo para que continúe". 

“No hay ninguna razón para suspenderla. Si hacemos un esfuerzo, que son algunos días más, teniendo en cuenta lo que estamos evitando, se justifica”, apuntó el funcionario.

El ministro destacó además que será el presidente Alberto Fernández quien decida si se amplía el aislamiento social obligatorio y confirmó que mañana domingo, en una reunión con el mandatario, se podría llegar a una medida al respecto.

Por otro lado, se refirió a la curva de infectados por coronavirus que presenta el país y aseguró: “El número de casos registrados viene por debajo de lo que veníamos previendo”. Este viernes, confirmaron otros cinco muertos y 101 nuevos contagios, por lo que el número de víctimas fatales asciende a 18, y el de infectados, a 690.

Además, indicó que “los primeros resultados de esta cuarentena” se podrán ver “recién después del 31 de marzo”, cuando se pueda analizar “si se mantiene una curva bien aplanada”.

“La estrategia es ganar tiempo para que se preparen mejor los servicios sanitarios”, dijo y agregó: "Buscamos evitar que el pico de demanda sea tan alto, que los casos sean los menos posibles y extendidos en el tiempo”.

"Desde el Gobierno se está mirando qué acciones toman otros países para estudiar si son aplicables en la Argentina. El mundo en general reaccionó tarde y nosotros pudimos tomar medidas desde antes de registrar el primer caso e ir de manera gradual hasta esta cuarentena”, remarcó.

Mientras tanto, aclaró que “las autoridades y los especialistas pronostican que el pico de coronavirus en Argentina será la segunda quincena de abril“, pero destacó que como se está “ralentizando quizá sea más adelante”. 

Los respiradores artificiales son otro tema que genera preocupación de cara al avance de la pandemia. El ministro contó que “Argentina tenía una capacidad muy limitada de producción de respiradores” y que se pusieron en contacto con las tres fábricas.