Aceleran el tratamiento de una ley que es objeto de presiones

Un proyecto clave que es objeto de presiones tendrá un tratamiento más acelerado en la Cámara de Diputados. Se trata de la ley de etiquetado, propuesta por dos senadores mendocinos, Anabel Fernández Sagasti y Julio Cobos. El proyecto ha sido motivo de tensiones con la industria alimenticia y el propio Cobos denunció presiones. 

 El presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, dispuso reducir de seis a tres la cantidad de comisiones que se abocarán al estudio del proyecto de ley etiquetado frontal de alimentos con exceso de azúcar, grasas y sodio, que fue aprobado la semana pasada en el Senado. A principios de esta semana se había dispuesto que el proyecto fuera girado a las comisiones de Legislación General; Salud; Defensa del Consumidor; Industria; Agricultura y Ganadería; y Economías y Desarrollo Regional, con cabecera en la primera.

Ante la polémica desatada por las dificultades que podría presentar el debate, al tener que ser abordado por tantas comisiones, Massa dispuso reducir el giro a las de Legislación General, Salud y Defensa del Consumidor.

El titular de la Cámara mantuvo la cabecera en Legislación General, que es presidida por la oficialista bonaerense Cecilia Moreau, y evitó de esta manera que dicha condición recayera en Salud, que es presidida por el tucumano Pablo Yedlin, también del Frente de Todos.

Es que en el Senado la mayor resistencia al proyecto que alerta sobre los excesos de azúcar en alimentos, llegó de parte de los legisladores que representan a Tucumán, la provincia líder en producción azucarera, y no se espera que en Diputados la reacción sea diferente.

El proyecto establece que aquellos productos con exceso de sodio, azúcar y grasas deberán llevar un sello de advertencia negro en sus envases, con el propósito de promover la alimentación saludable y combatir la malnutrición.