Suarez, el anticaudillo que busca "cambiar con diálogo"

Se le secó la voz varias veces. No es para menos: acababa de jurar como gobernador de Mendoza, una responsabilidad enorme e inesperada para él hace solo unos años. Rodolfo Suarez ya es Gobernador de Mendoza y buscó dar un mensaje de conciliación y de apertura.

En su primer mensaje Suarez dio un mensaje de apertura, de diálogo y acuerdo. Pero también dijo que gobernará con “autoridad”. Su impronta es la del anticaudillo. “Este va a ser el gobierno de todos. No creo en los caudillos”, aseguró. Como intendente, por ejemplo, eliminó la presencia de su nombre en las placas recordatorias y esa impronta de “bajo perfil” es la que busca marcar. Claro, como ocurre con todos los gobernadores, su autoridad estará a prueba. Por las dudas, él dijo que gobernará “con firmeza” y mantendrá el camino de reformas impulsadas por Cornejo. El eje, en ese sentido, es el orden administrativo para eliminar los “bolsones improductivos”.

En el discurso ante la Asamblea Legislativa, Suarez trazó algunos de los rasgos distintivos que quiere que tenga su gestión. Uno de los primeros ejes que abordó fue la educación y anunció que enfocará la gestión educativa al aprendizaje de “habilidades de adaptabilidad genérica” en los alumnos para prepararlos para el futuro.

Además, Suarez ratificó que impulsará la minería “en las zonas donde haya acuerdo y eliminando fundamentalismos”. “Se necesita coraje y decisión y eso es lo que vengo a ofrecer como término de consenso”, dijo el gobernador de Mendoza.

El Gobernador busca marcar un enfoque nuevo: la innovación. Fanático de la tecnología en lo personal, también quiere aplicarlo en la gestión estatal y en la economía. En el mismo plano ratificó que buscará crear un banco fintech y de segundo grado para financiar el sector productivo.

Uno de los temas calientes que deberá abordar en los primeros días tiene que ver con la negociación paritaria. Suarez puso un colchón de precaución. “Vamos a poner nuestras mejore intenciones en el ámbito paritario. Pero deben comprender que se hará solo en el marco de lo que pueden pagar los mendocinos”, dijo.

En lo gestual también trató de dar un mensaje de apertura y diálogo. Con la oposición, con el gobierno nacional, con quien espera tener “un vínculo de respeto” y con los mendocinos. Así, ratificó que será un gobernador itinerante.

“Vamos a poner nuestras mejore intenciones en el ámbito paritario. Pero deben comprender que se hará solo en el marco de lo que pueden pagar los mendocinos”, dijo.