Nuevas autoridades

Abed le agregó poesía a su discurso de juramento y se le durmió el nieto

El vicegobernador compartió un texto de su autoría con marcados tintes vendimiales. "Esto en un momento fue lo que escribí y lo que sentí y quise hoy leerlo de la manera que lo hice", expresó. Se quejó porque su nieto se quedó dormido.

Redacción MDZ
Redacción MDZ lunes, 9 de diciembre de 2019 · 19:16 hs
Abed le agregó poesía a su discurso de juramento y se le durmió el nieto
Mario Abed y Rodolfo Suarez Foto: Pachy Reynoso
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El vicegobernador Mario Abed juró este lunes en el cargo y aseguró que su experiencia como intendente le será de gran ayuda. "Eso te forma, te prepara y te da herramientas que nos serán muy útiles", aseguró. También le dedicó un poético párrafo al departamento de Junín y puso a su nieto -que se quedó dormido- como símbolo del crecimiento y de las futuras generaciones.

Abed aseguró que se convertirá en un puente entre el Poder Legislativo y el Poder Ejecutivo "para que a partir del disenso y las diferentes opiniones lleguemos a acuerdos que se transformen en leyes que ayuden a la ciudadanía". Pero también dijo que será un puente entre la ciudadanía y el gobernador y sus ministros, aprovechando siempre la figura de los intendentes porque son los más cercanos a los vecinos.

Pero sin dudas, el punto más alto fue su mensaje para los vecinos de Junín y los mendocinos en general. "Saben que vengo de de mi hermoso departamento, de su tierra, de sus viñas, de las manos que cuidan viñedos, de las uvas que hace vino, del vino que hace vida. Sacrificio y esperanza. Espero que al final del camino, dentro de cuatro años  en el último día de nuestro gobierno mi impronta de gestión como vicegobernador forme un surco profundo de buena tierra, bien abonado y con frutos fuertes y visibles a su lado. Vinimos a ser y dejar nuestra huella, a construir puentes duraderos. A lograr, en definitiva, que cada mendocino y mendocina sin importar afinidad política sienta orgullo por lo hecho por esta gestión de gobierno", expresó Abed. "Esto en un momento fue lo que escribí y lo que sentí y quise hoy leerlo de la manera que lo hice", remarcó. 

Luego le recordó a Rodolfo Suarez que le había prometido -en campaña- ser su mejor amigo, pero este lunes redobló la apuesta. "Le dije que quería ser su mejor amigo. Hoy quiero ser su hermano menor. Quiero que sepa que voy a estar cada día al lado suyo. Fielmente para servirle, a lo mejor -en algún momento- aconsejar y para cumplir los deseos que usted tenga para la provincia de Mendoza", manifestó.

Y a la hora de agradecer a su familia le envió sus cariños a su esposa, su hija y sus dos hijos. "Y a mi nieto que se ha dormido y no está viendo a su abuelo asumir. Él me dan fuerza para hacer todos los esfuerzos. Ver en él, que está en pleno crecimiento, que este esfuerzo vale la pena", concluyó.

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