Secuestraron la computadora de Julieta Makintach y analizarán sus discos rígidos
Buscan determinar si la computadora de la jueza Makintach contienen material clave sobre el documental filmado durante el juicio por la muerte de Maradona.

Julieta Makintach fue suspendida de su cargo como jueza.
NAJulieta Makintach volvió a recibir un revés judicial en la causa penal que enfrenta en San Isidro. Este viernes, el juez Esteban Rossignoli, titular del Juzgado de Garantías N°4, autorizó a los fiscales a secuestrar y analizar la computadora de la magistrada —actualmente licenciada por la Suprema Corte bonaerense— y los dos discos rígidos que guardaba en su despacho.
La medida apunta a establecer si contienen información relevante vinculada al polémico documental "Justicia Divina", rodado en pleno juicio por la muerte de Diego Armando Maradona.
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La decisión había sido solicitada por los fiscales Cecilia Chaieb, Carolina Asprella y José Amallo, y reforzada por los abogados Fernando Burlando y Rodolfo Baqué, querellantes en la causa. En su resolución, Rossignoli recordó que el CPU pertenece al Poder Judicial bonaerense y que ya se encontraba bajo resguardo en la Delegación de Tecnología Informática de San Isidro.
“El material podría contener información de interés para la investigación”, advirtió el juez, aunque aclaró que solo se incorporarán a la pesquisa los datos que guarden estricta relación con el caso.
Otro traspié para Makintach
En paralelo, Makintach sufrió otro traspié semanas atrás, cuando la fiscalía de Rincón de Milberg desestimó su denuncia contra los fiscales de la causa por supuesta falsedad ideológica, abuso de autoridad y manipulación de pruebas. La presentación había sido realizada por su abogado Darío Saldaño, quien apuntaba a presuntas irregularidades en el expediente.
En las últimas horas también se incorporó el testimonio de una esteticista que reconoció haber compartido el tráiler del documental con una funcionaria judicial sin autorización de la jueza. Según relató, recibió el video de una colega y lo reenvió por WhatsApp a Marina Rodríguez, secretaria de la Defensoría de Juicio de San Isidro, cuando el escándalo ya había tomado estado público.
La testigo aseguró que conoció a Makintach en un consultorio de medicina estética y que en algún momento la atendió, aunque aclaró: “Nunca hablé con ella del caso Maradona”. En su declaración sostuvo que la jueza reaccionó con intensidad al enterarse de la difusión del material, insistiendo en la existencia de “una mafia que quería destruirla”.