No fue femicidio: un jurado determinó que un policía mató a su pareja de un disparo accidental
Un jurado halló culpable a Franco Cuello por el delito de homicidio culposo. Así, definieron que mató a su pareja, Valeria Ramírez, de un disparo accidental.

Franco Cuello, el policía que zafó de una condena a perpetua por femicidio.
Un jurado popular puso fin este viernes a la investigación por la muerte de Valeria Ramírez, ocurrida durante 2022 en Godoy Cruz, por la que se encontraba detenido su pareja, el policía Franco Cuello Nadal. Los doce ciudadanos determinaron que no hubo femicidio, tal como lo aseguraba la fiscalía, y entendieron que el policía mató por accidente a la mujer.
Así las cosas, el juez técnico Alejandro Miguel fijará la semana próxima la fecha para realizar una audiencia de cesura, en la que las partes solicitarán la pena que crean correspondiente. Debido a que el exintegrante del Grupo Especial de Seguridad (GES) fue hallado culpable por el delito de homicidio culposo, arriesga un castigo de tres a seis años de prisión.
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La teoría del femicidio
Durante el debate, el fiscal en jefe de Homicidios, Fernando Guzzo, y la querella argumentaron que Cuello le disparó a Ramírez a corta distancia en la habitación que compartían, un hecho enmarcado en una relación marcada por la violencia.
Entre las pruebas clave, se destacó el testimonio del hijo de la víctima, quien fue apuntado por la defensa como el culpable del hecho. "Le estaba peleando en la cama, entonces hizo así con el arma y entonces mató a mi mamá", fue una de las declaraciones del menor en la Cámara Gesell.
Además, se descartó que hubiera sido el menor, ya que la prueba de guantelete o barrido electrónico no encontró restos de pólvora en su cuerpo. Además, la altura del niño contrastaba con el ángulo del disparo.
Durante el alegato de cierre de la Fiscalía, se repasaron los distintos puntos que conformaron la acusación del caso, entre estos, el contexto de violencia de género que, de acuerdo con testigos, existía entre Cuello y Ramírez.
Esta situación fue descrita por la madre y la hermana de la víctima en frente al jurado. A estos testimonios, se sumaron mensajes de WhatsApp entre Cuello y Ramírez, presentados como pruebas de “violencia psicología", por la Fiscalía.
“El mensaje del 20 de noviembre, a escasos días del asesinato, Valeria le escribe: ‘pienso que lo mejor sería separarnos para siempre’”, expresó Guzzo.
La hipótesis de la defensa
Antes de que se conociera el veredicto, los abogados defensores, encabezados por Leonardo Pascón, presentaron críticas al relato oficial y planteos hechos durante el debate, principalmente por parte de los efectivos involucrados.
“Nos mintieron, esto no paso como nos están contando”, indicó el abogado defensor sobre la reconstrucción técnica de la policía.
“Esa arma está manipulada”, prosiguió el alegato de cierre de Pascón, centrándose en la pistola que terminó con la vida de Ramírez.
Por otro lado, manteniendo la postura de que el autor del disparo fue el hijo de la pareja, subrayó: “No sabemos qué pasó con el menor. Es posible que se le hayan hecho desaparecer los rastros”.
El abogado defensor hizo referencia al testimonio de la madre de la víctima, abuela del niño, quien declaró no recordar con quién dejó a su nieto cuando ocurrió el hecho, y a la prueba de guantelete, donde se comprueba si una persona tiene restos de pólvora en las manos, la que no encontró restos del químico en el menor,
La palabra del policía antes del veredicto
Terminados los alegatos, el acusado de asesinar a su pareja se dirigió al jurado, al fiscal Guzzo y a la familia de Ramírez. Primero, cargó contra el representante del Ministerio Público Fiscal (MPF) por los mensajes de WhatsApp que leyó durante el juicio: “Me gustaría saber si me puede leer la parte donde yo la trate como una negra de mierda (a Ramirez). Me parece una falta de respeto muy grande, yo nunca la traté así”, arremetió.
Luego, comenzó a hablar para los 12 miembros del jurado y para la familia de la fallecida: “Tengo mucha responsabilidad de lo que paso, porque por culpa de un descuido mío mi mujer ya no está. Mis hijos se quedaron sin mamá. A familia de mi mujer le pido perdón”. Y reiteró: “Yo no me hice la víctima. Soy totalmente responsable, porque por un descuido mío fue que paso todo esto”.
La muerte de Ramírez
Valeria Ramírez, de 26 años, murió la madrugada del 26 de noviembre de 2022 tras recibir un impacto de bala en su domicilio del barrio La Gloria. Fue el propio Cuello quien llevó a su pareja al Hospital Central, donde horas después perdió la vida a raíz de la herida de bala.
En primera instancia, poco después del deceso de la mujer, el policía aseguró a sus pares que fue su hijo, quien tenía 4 años en ese entonces, quien accionó accidentalmente su pistola reglamentaria contra su madre. Sin embargo, esa versión no resultó creíble para los detectives y Cuello terminó siendo imputado.
Casi 3 años después, un jurado determinó que el expolicía del Grupo Especial de Seguridad (GES) mató a su pareja de manera accidental.