Mientras espera ser juzgado por un robo fatal en Guaymallén, lo condenaron por estafar desde la cárcel

Marcelo Gastón Mendoza Carrizo (33), a la espera de pasar por un juicio por jurado por el crimen de un fletero durante un robo en Guaymallén y con riesgos de prisión perpetua, este miércoles fue condenado por una estafa cometida desde la cárcel. En un juicio abreviado admitió el engaño a una comerciante  y recibió la pena de 2 años y 6 meses en efectivo. 

Tras el acuerdo de las partes, el abogado defensor y la fiscal Claudia Ríos-incorporó el expediente al llevar la causa del homicidio-, el juez Sebastián Sarmiento dictó la sentencia luego de la confesión del acusado. 

De esta manera, el hombre agregó otra condena a su prontuario: ya contaba con penas por robos, amenazas y tentativas de asesinato. 

El hecho que ahora le imputaban a Mendoza lo cometió desde el penal de San Felipe, a los meses de quedar detenido por la muerte de Juan Mauricio Villanueva (55) en un asalto. 

De acuerdo a la denuncia y a lo que fiscalía pudo probar, el sospechoso engañó a una mujer que se dedicaba a la venta de botellas de salsa. Este sujeto accedió a su número de teléfono y la contactó, pactando la compra de más de 400 unidades que le pagaría a través de la billetera digital de Mercado Pago. 

El monto a transferir eran 90.000 pesos que nunca impactaron en la cuenta de la víctima, quien recibió un falso comprobante y creyó que la transacción estaba realizada. 

Entonces, le entregó a un taxista el pedido y este lo llevó a la casa del padre del ahora condenado. Con el paso de las horas la damnificada advirtió que el dinero nunca ingresó, sospechó de la maniobra ya que su supuesto cliente no le respondió más y realizó la denuncia en la Fiscalía de Delitos Económicos. 

La investigación avanzó porque la mujer pudo precisar el número de aditamento del taxi y su conductor fue identificado. Declaró y señaló el domicilio al que llevó las salsas. 

Así llegaron a la familia Mendoza, siendo imputados el detenido y su progenitor, ambos por estafa. El padre terminó accediendo a una probation porque no tenía antecedentes y porque su participación fue menor, quedando complicado su hijo luego de que comprobaran que él realizó el llamado desde la cárcel con una línea de tcelular a su nombre.

Su acusación más grave 

El asesinato del fletero Villanueva ocurrió en la noche del 10 de abril del 2022, mientras él llegaba a su casa junto a su madre, luego de presenciar la misa de los domingos. 

Arribaron a bordo de una camioneta Nissan Frontier y el hombre estacionó en el puente y se bajó para abrir la puerta de la cochera. En ese momento, y estando él de espaldas a la situación, dos delincuentes se metieron en el vehículo y sorprendieron a la señora. 

Uno de los malvivientes se encargó de ponerse frente al volante y el otro sacó a la mujer bruscamente, haciéndola caer al piso. De esa manera arrancaron con el rodado, siendo perseguidos por Villanueva. 

La desesperación de Juan fue porque creyó que los ladrones se llevaban a su mamá y, directamente, se colgó de la parte trasera del coche. En la cajuela fue arrastrado algunos metros, hasta que en la esquina de calle Los Álamos frenaron -dejando una marca en el asfalto- y uno de ellos bajó y le disparó en el pecho. Tras balearlo, los agresores escaparon en la Nissan. 

El señor quedó herido y un vecino se acercó a asistirlo; a él le dijo que le habían tirado con un calibre 32 -esto fue corroborado- y que uno de los sujetos tenía una estrella tatuada al lado del ojo izquierdo. La información se la repitió a los policías que llegaron a la escena e incluso a los detectives de Homicidios que se trasladaron al Hospital Central, donde quedó internado. 

Allí la víctima peleó por su vida 9 días, y el 19 de abril falleció. Seis días después, y luego de una rápida investigación, fueron atrapados los sospechosos: Gabriel Alejandro Romero (37) y Mendoza.

 El primero de ellos estaba señalado en el expediente como el autor del disparo y hace un par de semanas accedió a un abreviado y recibió prisión perpetua, en tanto que Mendoza, que habría conducido la Frontier que días después fue hallada quemada en un descampado de Las Heras, aguarda un juicio por jurado imputado por homicidio criminis causa.