Mirtha Legrand, entre los "enemigos" de la secta porno de Villa Crespo

La denominada secta porno de Villa Crespo tenía "enemigos" declarados, a quienes ellos le profesaban "la muerte" y su "destrucción". Según confiaron fuentes de la investigación, Mirtha Legrand es una de las personalidades de ese listado, aunque se desconoce el por qué eran considerados "enemigos".

En el mismo listado en el que se encontró a Mirtha Legrand, también aparecía el nombre del exjuez Mariano Bergés, quien investigó a esa misma secta años atrás, pero la denuncia fue archivada. Además están otros funcionarios judiciales como el fiscal Patricio Lugones o su colega Joaquín Gasset y también figuran en la nómina Diego Guelar y Raúl Granillo Ocampo.

Mientras tanto, el juez Ariel Lijo ordenó varias medidas de prueba como ser extraer y analizar el contenido de los VHS encontrados en los allanamientos. Una de las sospechas que mantienen los pesquisas es que muchas de las relaciones sexuales donde las alumnas mujeres eran explotadas, también eran filmadas.

En las últimas horas además, el juez recibió un informe preliminar de la oficina de rescate del Ministerio de Justicia, cuyo personal fue al procedimiento y entrevistó a las víctimas, quienes eran explotados sexualmente, estafados y captados por la organización de Escuela de Yoga. En el escrito consignaron que las víctimas tenían cierta resistencia a contar lo que les pasó y notaron que las mismas habían sido aleccionadas sobre qué decir, por lo cual se aconsejó profundizar las entrevistas.

Por su parte, el juez Lijo también ordenó el análisis de las historias clínicas para que se realice un informe sobre los tratamientos y medicamentos recetados a los alumnos. Según surge del expediente, como prácticas de castigo, la organización imponía un combo de pastillas y alcohol para provocar sueños prolongados.

En las próximas horas se definirá si algunos de los líderes de la secta de Villa Crespo van a seguir detenidos o no, ya que Juan Percowicz, considerado la cabeza de la misma, tiene 84 años y problemas de salud, y se evalúa una eventual prisión domiciliaria.