Crimen del joven venezolano: declararon los detenidos y fueron imputados

En la tarde de este martes fueron imputados los primeros dos detenidos por el crimen del joven venezolano, ultimado la semana pasada de un disparo en el pecho durante un asalto en la Ciudad de Mendoza. Los acusados declararon y reconocieron haber estado en el hecho. 

Maximiliano Castillo (23) y Walter Díaz (25) fueron arrestados tras allanamientos realizados en la noche del lunes en Godoy Cruz y en Ciudad, respectivamente. El primero está sindicado como quien conducía un Peugeot 308 que hizo de "apoyo" en el atraco fatal y que fue secuestrado por la Policía en las últimas horas, en tanto que el otro joven sería el malviviente que acompañaba al sujeto que disparó y con quien se habrían fugado en el Ford Focus de la víctima fatal, Jean Carlos Sosa (26). 

Ambos sospechosos recibieron la imputación de parte del fiscal Carlos Torres por homicidio criminis causa -matar para ocultar otro delito- en calidad de coautores, en concurso real con robo agravado por el uso de arma de fuego. Calificación con pena única de prisión perpetua. 

Los detenidos, ante la notificación de su situación procesal, decidieron declarar. Confesaron haber participado del asalto, aunque aseguran los dos que estuvieron siempre en el Peugeot, a metros de distancia de la casa del muchacho asesinado y donde le sustraían el auto, en calle Chenaut al 3.100, de la Cuarta Sección. 

Agregaron en su relato que quienes atacaron al joven venezolano son otros dos hombres, que tras el disparo escaparon con el rodado de Jean Carlos, que dos días después apareció totalmente quemado en Guaymallén. 

Si bien los investigadores no descartan que hayan sido cuatro los delincuentes involucrados, por ahora tienen pruebas para acusar a tres señalados ladrones; dos de ellos detenidos -los imputados- y uno prófugo e identificado. 

En cuanto a este último, se trataría del autor del disparo letal y de quien se encontraron huellas dactilares en una camioneta Volkswagen Amarok, recuperada luego de ser robada en otro hecho y que sirvió para encaminar la investigación del crimen de Sosa. 

Contra los otros acusados hay testimonios y una serie de pruebas que los complican. Díaz cuenta con antecedentes por lesiones, amenazas agravadas por el uso de arma de fuego, daño simple y abuso de armas, mientras que Castillo salió de la cárcel en octubre pasado tras una condena de cinco años por un abuso sexual. Ahora los dos, ya imputados , pasarán al penal. 

En paralelo, la Fiscalía de Homicidios y la Policía buscan al tercer sospechoso.