Crimen y robo a metros de una comisaría: un joven se entregó y fue imputado

En pocos días la investigación por el crimen de un hombre en su casa de Ciudad, Mendoza, empezó a encaminarse y concretó la primera detención e imputación. Un joven se entregó y quedó formalmente como acusado de matar a la víctima y robarle. 

Sergio Calderaro (30) fue encontrado sin vida en la noche del sábado pasado, en el baño de la vivienda donde residía, en calle Gutenberg casi San Martín, a la vuelta de la Comisaría Cuarta. 

Desde la mañana de esa jornada el hombre no respondía ni a los llamados telefónicos de su padre ni a los vecinos que le golpeaban la puerta, por lo que cerca de las 22.30 se hizo presente la Policía y con la llave que les dio el progenitor los efectivos entraron y dieron con el muchacho tirado y  fallecido. 

Los peritos de Policía Científica examinaron el cuerpo y observaron una herida de arma blanca en el abdomen, por lo que confirmaron que se trataba de un una muerte violenta. En varios sectores del inmueble -por ejemplo, sobre la cama, en la habitación-, había manchas de sangre y algunas bebidas alcohólicas tiradas en el piso. Además estaba arrancada una ventana,. en la que se detectó la marca de una mano ensangrentada. 

El primer trabajo de los investigadores fue revisar las cámaras de seguridad de las inmediaciones, a partir de donde empezaron  a recabar algunas certezas. Entre ellas, el arribo al domicilio de varias personas, siendo una ellas la novia de Calderaro. 

Esta mujer luego declaró y explicó que en la madrugada del sábado habían estado en un boliche de la Alameda, que se dirigieron a la casa de su pareja alrededor de las 3.30 y un rato después ella se fue. 

Las grabaciones también aportaron la llegada de dos sujetos más, que se habrían retirado cerca de las 5.30. También se observaron discusiones en la vereda. 

En todo este contexto, los pesquisas ya habían tenido aprehendido en la comisaría al ahora acusado, porque lo habían encontrado deambulando en la zona y con lesiones en los brazos. Luego lo liberaron, pero ante la incorporación de pruebas fueron otra vez por él. 

Antes de que lo detengan, el hombre se entregó en la noche del martes y lo imputaron. Se trata de Facundo Rojas (23), acusado formalmente en el expediente por homicidio criminis causa -delito con pena de prisión perpetua-, ya que los pesquisas entienden que este joven y un cómplice asesinaron a Calderaro para ocultar el robo. Esto porque en la vivienda faltaban un televisor y varias pertenencias del fallecido, como vestimentas y electrodomésticos. 

El otro presunto autor del crimen ya habría sido identificado a través de las cámaras, pero aún no ha sido detenido. Todo indica que los sospechosos conocían a la víctima y por eso entraron a su casa; posteriormente hubo una discusión, el ataque y el robo.