Asalto al camión blindado: condenaron al acusado a 15 años de prisión

En el segundo juicio por el asalto al camión de caudales ocurrido en 2008 -un hecho en el que se registró un tremendo tiroteo y en el que murió un policía- este miércoles fue condenado en Mendoza Víctor Miguel García. El jurado lo encontró culpable como partícipe secundario del delito de homicidio agravado criminis causa en concurso real con robo agravado por el uso de arma de fuego en poblado y en banda en grado de tentativa, por lo que recibió una pena de 15 años de prisión.

Pasó más de una década desde que Eduardo Correa (42) falleció a causa de los diez plomazos que le dispararon durante el asalto a un camión blindado que estaba estacionado en una universidad mendocina. El lunes pasado se inició el segundo proceso por ese caso y tras varias deliberaciones, doce mendocinos y mendocinas llegaron a la conclusión que marcará el futuro de García. 

El caso

El 1 de septiembre del 2008, un grupo de delincuentes llegó al estacionamiento de la Universidad Juan Agustín Maza, en Guaymallén, con la intención de asaltar el camión de caudales. Ese día habían suspendido las clases debido a un fuerte viento Zonda.

Los ladrones llegaron en tres vehículos y con una logística planificada, intentaron asaltar el camión. En ese momento se enfrentaron a los tiros con los policías que lo custodiaban. Como consecuencia de la balacera, Correa recibió una decena de impactos y murió en el lugar. Su compañera fue herida, al igual que uno de los delincuentes.

Los maleantes escaparon rápidamente sin robar nada. En la huida dejaron abandonado un auto y un Nextel a nombre de uno de ellos. A pocos días del hecho, la Policía detuvo a una docena de sospechosos, pero en un principio sólo dos llegaron a juicio. Se trata del expolicía Víctor Vargas Cabello (47) -dueño del Nextel- y Darío Cantos (33), quien fue apresado en el hospital donde se encontraba internado tras recibir un disparo en el asalto. Ambos fueron condenados a perpetua en el 2011.

En ese momento, también fue apresado Víctor Miguel García, pero el juez consideró que las pruebas en su contra no eran suficientes y quedó en libertad. En realidad, estaba con condicional desde 2006, pero -como se vio- en menos de un año ya estaba delinquiendo una vez más. El fiscal de la causa de ese momento apeló y la Corte le dio la razón. Cuando ordenaron nuevamente la captura, García no fue encontrado.

Estuvo prófugo un largo tiempo. Finalmente en diciembre del 2020 fue apresado e imputado por homicidio criminis causa, es decir que se considera que su participación en el crimen se agrava por haber asesinado al efectivo con la intención de ocultar el ilícito que se estaba cometiendo.

En sus palabras de cierre, el jefe de fiscales de Homicidios Fernando Guzzo tuvo en cuenta que al momento de concretar el asalto García no estaba "en la miseria", es decir que el móvil no fue la desesperación sino el simple y pueril hecho de querer acumular dinero de manera ilícita. 

Finalmente, la jueza Nancy Lecek dictó la pena de 15 años de prisión, el máximo en la escala para el encuadre penal y lo que habían solicitado los fiscales Claudia Ríos y el mencionado Guzzo, tras conocer la decisión del jurado. Por su parte, el abogado defensor, Fernando Servente, había solicitado el mínimo de 10 años.