¡Anímate a preparar coliflor gratinado con queso!: receta fácil y cremosa.
Receta de coliflor gratinado con queso: una opción deliciosa, cremosa y fácil para disfrutar al horno. Ideal como plato principal o acompañamiento.

Receta de coliflor gratinado con queso paso a paso.
ShutterstockEsta receta de coliflor gratinado con queso es perfecta para quienes buscan una comida reconfortante, sabrosa y sencilla. Ya sea como plato principal o como acompañamiento, destaca por su textura cremosa, su sabor equilibrado y su irresistible capa dorada de queso gratinado que conquista a todos desde el primer bocado.
El coliflor gratinado con queso es una de esas preparaciones clásicas que nunca pasan de moda. Su combinación de ingredientes simples pero sabrosos la convierte en una opción ideal para disfrutar en cualquier estación del año. El sabor suave de la coliflor se potencia con la cremosidad de la salsa blanca y el toque irresistible del queso derretido y dorado. Esta receta es además muy versátil: puede servirse como plato único para una comida liviana o acompañar carnes y pescados en una cena más completa. Además, es una excelente manera de incluir vegetales en la dieta, especialmente para los más pequeños, ya que el queso suaviza su sabor y aporta una textura muy agradable. Prepararla en casa es muy sencillo y no requiere técnicas complicadas, lo que la convierte en una excelente opción para cocineros principiantes o para quienes buscan un plato rendidor, económico y nutritivo. Ideal para llevar al horno y disfrutar caliente, recién gratinado, en familia o con amigos.
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Ingredientes
1 coliflor mediana, 2 cucharadas de manteca, 2 cucharadas de harina, 500 ml de leche entera, 1 pizca de nuez moscada, sal fina a gusto, pimienta negra recién molida a gusto, 150 g de queso rallado (tipo parmesano, reggianito o pategrás), 100 g de queso mozzarella rallado, pan rallado (opcional para espolvorear), aceite vegetal para engrasar la fuente.
Paso a paso para preparar coliflor gratinado con queso
- Comienza retirando las hojas externas y el tallo central de la coliflor. Luego, córtala en pequeños ramilletes del mismo tamaño para que se cocinen de forma pareja. Lava bien bajo agua fría y reserva en un colador.
- Llena una olla grande con agua y añade una pizca de sal. Cuando hierva, incorpora la coliflor y cocina durante 7 a 10 minutos, hasta que esté tierna pero firme (no debe deshacerse). Escurre y reserva.
- En una cacerola mediana, derrite la mantequilla a fuego medio. Agrega la harina y mezcla con una cuchara de madera durante 1 a 2 minutos, hasta formar un roux. Añade la leche poco a poco, revolviendo constantemente para evitar grumos. Continúa cocinando hasta que espese, sin dejar de mezclar. Condimenta con sal, pimienta y una pizca de nuez moscada.
- Cuando la salsa esté lista y espesa, apaga el fuego e incorpora la mitad del queso rallado (una mezcla de parmesano y mozzarella). Remueve hasta que el queso se derrita completamente y se integre con la bechamel.
- Precalienta el horno a 200°C. Unta una fuente apta para horno con un poco de aceite o mantequilla. Distribuye los ramilletes de coliflor cocidos de manera uniforme en la fuente. Vierte encima toda la salsa de queso, procurando cubrir bien toda la superficie. Espolvorea con el queso restante y, si deseas, añade una ligera capa de pan rallado para un acabado más crujiente.
- Lleva la fuente al horno precalentado y hornea durante 15 a 20 minutos, o hasta que el queso esté burbujeante y dorado en la parte superior. Para un resultado más crujiente, puedes activar el gratinador (grill) durante los últimos 3 minutos de cocción, vigilando que no se queme.
De la cocina a tu mesa
Retira del horno y deja reposar unos minutos antes de servir. Este platillo se disfruta mejor caliente, recién salido del horno, cuando el queso aún está fundido y la salsa bien cremosa.
Este coliflor gratinado con queso es una excelente opción tanto para una comida rápida como para una ocasión especial. Puedes acompañarlo con una ensalada fresca, arroz blanco o añadirle jamón cocido picado si deseas un aporte extra de proteínas. También es apto para congelar: puedes preparar porciones individuales, gratinarlas y conservarlas para otro momento. ¡Y a disfrutar!