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Mermelada de pera casera: la receta perfecta para disfrutar todo el año

Aprende paso a paso y fácilmente a preparar una deliciosa mermelada de pera con nuestra receta favorita e imbatible.

Napsix domingo, 12 de enero de 2025 · 18:01 hs
Mermelada de pera casera: la receta perfecta para disfrutar todo el año
La mejor receta de mermelada de pera para regalar o disfrutar Foto: Shutterstock

La mermelada de pera es una deliciosa opción para quienes disfrutan de los sabores suaves y dulces, combinando la textura jugosa y suave de la fruta con el toque justo de dulzura. Elaborada de manera casera, esta mermelada es perfecta para untar sobre tostadas, acompañar quesos, o incluso para agregar a postres como pasteles y yogures. Su proceso de preparación es sencillo, pero el resultado es exquisito, y permite conservar el sabor fresco y natural de la pera durante más tiempo.

La mermelada de pera tiene sus raíces en la Edad Media, cuando se utilizaban frutas cocidas con azúcar para crear conservas que se mantenían durante el invierno. Fuente: Shutterstock

El aroma que se desprende al cocinarla, con un toque sutil de vainilla o canela, puede llenar la casa de calidez, haciendo de la elaboración de la mermelada de pera una experiencia encantadora. Además, al ser hecha en casa, tienes la libertad de ajustar la cantidad de azúcar y otros ingredientes, logrando una mermelada que se adapte perfectamente a tus gustos personales.

Podrás aprovechar al máximo las peras maduras, creando un producto casero libre de conservantes, ideal para disfrutar durante todo el año. Además, es un regalo perfecto para ocasiones especiales, presentando un sabor tradicional y único que seguro encantará a todos. ¡Vamos a la receta!

Las peras contienen una cantidad significativa de pectina, lo que las hace perfectas para hacer mermelada sin necesidad de añadir mucha pectina extra. Fuente: Shutterstock

Ingredientes

1 kg de peras maduras (preferentemente peras Williams o Conference), 600 g de azúcar granulada, 1 cucharada de jugo de limón fresco, 1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional, pero aporta un toque especial), 200 ml de agua, 1/2 cucharadita de pectina (si prefieres una mermelada más firme, puedes utilizarla), 1/4 cucharadita de canela en polvo (opcional, para un toque especiado), unas gotas de jugo de limón (opcional, para evitar la oxidación).

 

Procedimiento

  1. Comienza pelando las peras y retirando el corazón y las semillas. Para este paso, es importante elegir peras maduras pero firmes, ya que las maduras aportarán un sabor más intenso y un mejor rendimiento al cocinar. Corta las peras en trozos pequeños y colócalos en un recipiente grande. Si no deseas que las peras se oxiden mientras las cortas, puedes rociarlas con unas gotas de jugo de limón.
  2. En una cacerola grande, agrega las peras picadas junto con el agua. Cocina a fuego medio, removiendo ocasionalmente para evitar que se peguen al fondo. Las peras comenzarán a liberar su jugo y se ablandarán. Cocina durante unos 10-15 minutos, hasta que las peras estén suaves y fáciles de triturar.
  3. Una vez que las peras estén bien cocidas, utiliza una batidora de mano o un procesador de alimentos para triturarlas hasta obtener un puré suave. Si prefieres una mermelada con más trozos, puedes dejarla un poco menos triturada.
  4. Agrega el azúcar granulada al puré de pera y mezcla bien. Añade también el jugo de limón y la esencia de vainilla (si estás usándola). Si decides incorporar la canela, es el momento de añadirla también. Remueve bien para que el azúcar se disuelva completamente.
  5. Lleva la mezcla a fuego medio-alto y deja que hierva, removiendo constantemente para evitar que se queme o se pegue. Una vez que la mezcla comience a hervir, reduce el fuego a medio-bajo y continúa cocinando, removiendo de vez en cuando. La mermelada comenzará a espesar. Si estás utilizando pectina, agrégala en este paso y sigue las indicaciones del paquete.
  6. Para saber si la mermelada ha alcanzado la consistencia deseada, realiza la prueba del plato frío: coloca una pequeña cantidad de mermelada sobre un plato frío y déjala reposar durante unos segundos. Luego, inclina el plato; si la mermelada se desliza lentamente, está lista. Si prefieres una mermelada más espesa, cocina por unos minutos adicionales.
  7. Cuando la mermelada haya alcanzado la textura deseada, retírala del fuego y deja que se enfríe un poco antes de envasarla. Mientras tanto, esteriliza los frascos que vas a utilizar. Para ello, hierve los frascos y las tapas durante 10 minutos y déjalos secar al aire. Vierte la mermelada caliente en los frascos esterilizados, asegurándote de dejar un pequeño espacio en la parte superior. Cierra los frascos de inmediato con sus tapas.
A menudo, la mermelada de pera se combina con especias como la canela o el jengibre, lo que le da un toque cálido y aromático, ideal para el invierno. Fuente: Shutterstock

Si prefieres conservar la mermelada por más tiempo, puedes hacer el proceso de conservación al baño maría. Esto consiste en colocar los frascos cerrados en una cacerola con agua hirviendo durante unos 15 minutos. Después, retira los frascos ¡Ya tienes lista tu mermelada de pera para saborear en familia! Recuerda, si tienes dudas o quieres aportar sugerencias de recetas, nos puedes contactar a cocinemosjuntosmdz@gmail.com te contestaremos a la brevedad.

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