Cómo hacer pizza a la fugazzeta: receta tradicional Argentina

La pizza a la fugazzeta es una joya culinaria de la gastronomía italo-argentina que ha conquistado los paladares de quienes buscan una experiencia única y deliciosa. Originaria de Buenos Aires, esta variante de pizza se caracteriza por su masa gruesa y esponjosa, su abundante relleno de queso y su distintiva cubierta de cebolla caramelizada. Inspirada en la clásica fugazza, que es una focaccia cubierta de cebolla, la fugazzeta lleva este concepto un paso más allá al incorporar una generosa cantidad de queso entre dos capas de masa, creando un bocado jugoso y lleno de sabor.

Esta pizza es ideal para aquellos que disfrutan de los sabores intensos y reconfortantes. La combinación del queso derretido con la dulzura de las cebollas caramelizadas y el toque aromático del orégano, la convierte en un plato irresistible. La fugazzeta puede servirse como plato principal o como un delicioso acompañamiento en reuniones y fiestas. Además, su preparación, aunque lleva tiempo y cuidado, es relativamente sencilla, permitiendo que tanto cocineros novatos como experimentados puedan deleitarse con el proceso de creación. En resumen, la fugazzeta no solo es un deleite para el paladar, sino también un homenaje a la rica herencia cultural de la cocina Argentina. ¡Vamos a la receta!

Ingredientes

Para la masa: 500 g de harina de trigo (preferentemente 000 o de fuerza), 325 ml de agua tibia, 25 g de levadura fresca o 7 g de levadura seca, 10 g de sal, 20 ml de aceite de oliva.
Para el relleno: 500 g de queso mozzarella rallado o en cubos pequeños, 200 g de queso provolone rallado (opcional, para un sabor más intenso).
Para la cubierta: 2 cebollas grandes, cortadas en rodajas finas, 2 cucharadas de aceite de oliva, 1 cucharadita de azúcar, sal y pimienta al gusto, orégano seco al gusto, aceitunas verdes o negras (opcional, para decorar).

 

Procedimiento

Prepara la masa

1. En un bol pequeño, disuelve la levadura fresca o seca en 100 ml de agua tibia junto con una pizca de azúcar. Deja reposar durante unos 10 minutos hasta que la mezcla esté espumosa.
2. En otro bol grande, tamiza la harina y añade la sal. Haz un hueco en el centro.
3. Vierte la mezcla de levadura activada en el hueco de la harina. Agrega el resto del agua tibia (225 ml) y el aceite de oliva.
4. Mezcla todo con una cuchara de madera hasta que la masa empiece a formarse. Luego, pásala a una superficie ligeramente enharinada y amasa durante unos 10 minutos, hasta obtener una masa suave y elástica.
5. Coloca la masa en un bol ligeramente aceitado, cúbrela con un paño húmedo y deja que repose en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que haya duplicado su tamaño.

Prepara el relleno y la cubierta

1. En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Añade las rodajas de cebolla y cocina, revolviendo ocasionalmente, hasta que estén doradas y caramelizadas, unos 20-25 minutos. Agrega el azúcar, sal y pimienta al gusto durante la cocción para realzar el sabor. Reserva.
2. Precalienta el horno a 220°C (428°F).

Arma la fugazzeta

1. Una vez que la masa haya fermentado, divídela en dos partes iguales. Estira una de las partes sobre una superficie enharinada hasta formar un círculo de aproximadamente 1 cm de grosor.
2. Coloca la masa estirada en una bandeja para pizza ligeramente aceitada. Distribuye el queso mozzarella y, si usas, el queso provolone uniformemente sobre la masa, dejando un borde libre de aproximadamente 2 cm.
3. Estira la otra mitad de la masa hasta formar otro círculo del mismo tamaño y colócalo sobre el queso. Sella los bordes presionando con los dedos para que no se escape el queso durante la cocción.
4. Distribuye las cebollas caramelizadas uniformemente sobre la parte superior de la masa. Espolvorea con orégano seco y, si deseas, decora con algunas aceitunas.
5. Lleva la fugazzeta al horno precalentado y hornea durante unos 20-25 minutos, o hasta que la masa esté dorada y crujiente, y el queso en el interior esté completamente derretido.
6. Una vez fuera del horno, deja reposar la pizza durante unos minutos antes de cortarla en porciones. Sirve caliente y disfruta de esta deliciosa pizza fugazzeta.

Para un toque especial, puedes añadir algunas hierbas frescas picadas, como albahaca o perejil, justo antes de servir. ¡Y a disfrutar! Recuerda, si tienes dudas o quieres aportar sugerencias de recetas, nos puedes contactar a cocinemosjuntosmdz@gmail.com te contestaremos a la brevedad.