Ramón Valdés

Por qué Don Ramón era el único que podía fumar en el set de 'El Chavo del 8'

Ramón Valdés gozaba de ciertos privilegios en Televisa y en la nota te contamos la razón.

Napsix jueves, 14 de octubre de 2021 · 11:28 hs
Por qué Don Ramón era el único que podía fumar en el set de 'El Chavo del 8'
Don Ramón

El Chavo del 8 es un programa que, a casi 50 años de su primera salida al aire, continúa haciendo reír a grandes y chicos por igual. Escrita por Roberto Gómez Bolaños y producida por Televisa, se posicionó como una de las series de televisión mexicanas más exitosas de todos los tiempos. Sus divertidos personajes se ganaron un importante corazón en miles y miles de espectadores en todo el mundo.

Uno de los que más carcajadas provocó, a lo largo del tiempo, ha sido Ramón Valdés, quien le dio vida a Don Ramón. Era un hombre viudo que criaba solo a su hija, La Chilindrina, y se escabullía del Señor Barriga para no pagarle la renta. A lo largo de las emisiones se lo vio realizar decenas de oficios pero con ninguno logró prosperar en el tiempo.

Para tristeza de miles de fanáticos de la vecindad más famosa creada por Chespirito, el querido actor falleció cuando apenas tenía 64 años de un cáncer de estómago producto de su gran adicción al tabaco. Los médicos trataron de revertir la enfermedad y lo intervinieron quirúrgicamente para reducirle el órgano afectado pero el tumor ya se había expandido en gran parte de su cuerpo y era tarde.

Valdés solía siempre estar con un cigarrillo en la mano cuando las cámaras se apagaban y, a diferencia de sus compañeros, él era el único que podía fumar en los sets de Televisa. ¿La razón? Emilio Azcárraga, director de la compañía, le guardaba un enorme aprecio y quería demostrárselo haciéndolo sentir lo más cómodo posible en la productora.

Ramón Valdés le dio vida a Don Ramón en la famosa vecindad creada por Roberto Gómez Bolaños

Lamentablemente, los privilegios de los que gozaba terminaron quitándole la vida y el 9 de agosto de 1988 falleció en el Hospital Santa Elena de la Ciudad de México. Su funeral fue modesto y algunos de sus compañeros pudieron acercarse a dar el pésame.

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