El esperanzador mensaje de los cardenales argentinos en Roma: "Ojalá podamos encontrar a la persona que siga el camino de Francisco"

El mundo sigue llorando la partida del papa Francisco, quien falleció a sus 88 años el pasado 21 de abril. Tras su muerte, durante cuatro días, miles y miles de fieles pudieron acercarse a la Basílica de San Pedro para despedir los restos del Sumo Pontífice, que descansaba en su féretro. Este sábado, finalmente, se llevó a cabo el solemne funeral del primer Papa argentino, que ya descansa en su tumba en la Basílica Santa María la Mayor, tal como él lo había pedido.

Mientras fieles a lo largo del mundo continúan lamentando la muerte del “Papa de todos, todos, todos”, los cardenales ya se preparan en la Santa Sede para comenzar con el Cónclave para elegir al nuevo líder de la Iglesia Católica. Entre los 133 cardenales, cuatro son argentinos: Víctor Manuel Fernández, Ángel Sixto Rossi, Vicente Bokalic Iglic y Mario Aurelio Poli. Este sábado, dos de ellos declararon qué esperan para el nuevo papado.

Al finalizar la tradicional Misa de las Exequias en Roma, esta mañana, el arzobispo de Santiago del Estero, Vicente Bokalic, habló con un periodista argentino sobre el cariño que expresaron los fieles al despedir el cuerpo del papa Francisco. “Me parece que la gente acompañó hermosamente la celebración. Las expresiones, en el momento de la predicación, muestran que la gente se sintió interpretada… mejor dicho, hizo suyo el mensaje del papa Francisco. Ahí brotaba espontáneamente ese aplauso que es un signo de aquello que ha sembrado Francisco y que ha quedado profundamente en el corazón del pueblo”, afirmó el cardenal.

Mirá el testimonio de los cardenales Rossi y Bokalic en Roma

Por su parte, Ángel Rossi, arzobispo de Córdoba, destacó la capacidad de bondad que tenía Francisco para, en nombre de Dios, poder “aglutinar al mundo entero”. “En esta misa me acordaba su presencia en un cuartito al lado del patio, allá en el Convento de la Compañía, totalmente anónimo y, de golpe, ver esto… uno hace una especie de contraste casi ilógico. Qué locura la fuerza de la bondad, la fuerza de quien se animó a vivir el Evangelio”, se sinceró su eminencia.

“Sobre la manifestación del pueblo, la graduación de los aplausos cambiaba según la importancia de los temas para la gente. Y el mayor aplauso se lo llevó la necesidad de la paz. El pueblo fue sintiendo lo que había en el corazón del Papa, especialmente, en el último tiempo”, subrayó Rossi sobre la necesidad de paz en un mundo sumido por la violencia.

Enseguida, ambos cardenales reflexionaron sobre el Cónclave, que iniciaría en los próximos días, y qué esperan del nuevo Papa. “Para mí el Cónclave es un mundo desconocido; conozco pocas caras (de los demás cardenales) por las fotos. Creo que la primera tarea va a ser conocemos”, dijo Bokalic y agregó: “Lo que nos ha dejado el papa Francisco es hacia dónde queremos caminar y lo que quizás el mundo espera hoy, esta cercanía con la gente y llevar el Evangelio a las periferias; creo que por ahí pasa. Que la gente pueda comprender el lenguaje del Evangelio hoy es una de las cosas que tenemos que pensar para el sucesor de Francisco. Ojalá que podamos encontrar esa persona que siga este camino”.

El cardenal Rossi, luego, enfatizó en que, a pesar de la triste pérdida que todos están atravesando, aún sienten aires de esperanzas en el Vaticano. “Lo que uno conversaba con los cardenales que uno los sabe buenos, es que por un lado hay mucho dolor y, por otro lado, hay una sana y linda esperanza, aún en medio de las contradicciones y aún, también, frente a la realidad de que a veces el diablo mete la cola en quienes piensan distinto”.

“Sobre todo, hay esperanza de que estas cosas las maneja Dios. Aún en medio de nuestras humanidades, tenemos la certeza de que Dios monitorea estas cosas por encima de nuestras virtudes y de nuestras miserias”, concluyó con esperanza Rossi.