Tiene un cáncer terminal y quiso dejarle un mensaje a su hija

Jay Hewitt tiene cáncer cerebral en estado terminal. Como sabe que el tiempo se le acorta, quiso dejarle un mensaje de esperanza y superación a su hija.

Si bien fue en 1989 cuando se enteró de la existencia del triatlón Ironman, la idea de correr uno comenzó a hacerse fuerte en 2015, cuando nació Hero. Su intención era que ella pudiera verlo competir en una de esas carreras cuando cumpliera los diez años.

Pero el diagnóstico lo obligó a cambiar sus planes y correr contra el tiempo. En 2019 comenzó a tener las primeras sesiones de quimioterapia y algunas cirugías. No cambiarían el pronóstico, pero le darían unos años más de vida.

Como los eventos Ironman se suspendieron por la pandemia, se contactó con los organizadores que le propusieron hacer una carrera virtual IRONMAN VR Kona. Para esta podría diseñar su propio trayecto en su ciudad natal con la única condición de que la línea de meta fuera en las puertas de su propia casa.

El 9 de octubre de 2020, con 38 años, partió desde Back Bay de Newport Beach, nadó 3.8 kilómetros y luego agarró la bicicleta. Pedaleó 180 km hasta llegar al lugar donde comenzó la maratón de 42 km.

A mitad de camino sintió nausea y vomitó. El dolor se hacia cada vez más presente. Pero no renunció y continuó su carrera. Después de 13 horas y 40 minutos, dobló la esquina de su casa.

Cientos de personas lo animaban al final del trayecto. Sobre la línea de meta, su hija y esposa lo esperaban. Jay, con 38 años y cáncer cerebral terminal corrió los últimos metros y abrazó a su hija cuando llegó al final del recorrido.

Ahora quiere homenajear a su esposa, pero esta asegura que, aunque respeta su decisión, no le permitirá hacer nada tan arriesgado... por lo menos por un año.

Fuente: Jay Hewitt youtube, instagram y facebook