Una gran capital latinoamericana suspende festejos del Día del Padre

La Ciudad de México se convirtió hoy en la primera capital latinoamericana en pedirle a sus ciudadanos quedarse en casa para el Día del Padre, que se celebrará este domingo 21 de junio, a la vez que las autoridades anunciaron un acuerdo con los restaurantes para aplazar este festejo debido a la pandemia de COVID-19.

"El próximo domingo es Día del Padre pero aún no estamos en condiciones de celebrar fiestas", expresó a través de redes sociales la jefa del Gobierno capitalino, Claudia Sheinbaum.

La alcaldesa hizo "un llamado a toda la ciudadanía para que entre todos cuidemos a nuestros papás y los celebremos a distancia". Además, presentó una campaña informativa para disuadir las reuniones familiares el domingo, titulada: "Está padre (bueno) quedarnos en casa".

En ese sentido, la Secretaría de Desarrollo Económico de la capital acordó con la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) aplazar la celebración del Día del Padre al 16 de agosto, el tercer domingo del mes.

La capital mexicana, la zona más afectada por la pandemia en el país, inicia esta semana la lenta reapertura de algunos negocios tras dos meses de cierre económico, aunque se recomienda a los ciudadanos permanecer en casa lo máximo posible. Además, los restaurantes no podrán abrir hasta el 24 de junio, por lo que este domingo los ciudadanos no podrán salir a comer para festejar a sus padres como dicta la tradición.

El pasado 10 de mayo, las autoridades mexicanas también pidieron a los ciudadanos permanecer en casa y celebrar a distancia el Día de las Madres a fin de frenar la propagación de contagios.

México suma 150.264 casos y 17.580 fallecidos confirmados de COVID-19, de los cuales 37.500 contagios y 4.700 muertes han sido en la capital.