La situación que deja a Julieta en un delicado escenario en Gran Hermano

Julieta Poggio, una de las participantes más queridas por el público de Gran Hermano (Telefe), se coronó este martes como líder de la semana en el desafío planteado en el exitoso reality, y más allá de que ganó la inmunidad que le garantiza que no podrá ser nominada este miércoles por sus compañeros, quedó frente a un temible escenario que podrían tramar los restantes integrantes de la casa.

En el juego de la semana, los concursantes de Gran Hermano tenían que colocar ocho pelotas sobre unos pilares de una plataforma suspendida en una base inestable, y la prueba consistió en contar con la templanza y precisión necesarios para completar el desafío sin que ninguna de las bolas caiga al suelo. 

En semifinales del juego propuesto por Gran Hermano quedaron la dupla compuesta por Marcos y Lucila, y la de Nacho con Julieta. Al consagrarse los últimos como vencedores pasaron a la final, pero compitiendo de manera individual.

En una gran muestra de actitud y paciencia, Julieta Poggio logró superar la prueba frente a un nervioso Nacho que en varias oportunidades perdió el control de las pelotas que terminaron cayendo al suelo. 

De esta manera, por primera vez en lo que va de la emisión del exitoso programa, Julieta consiguió acceder al liderazgo de la semana en Gran Hermano. “Al fin, tenía muchas ganas de ganar para ver lo que se siente, está bueno, es divertido más allá de la presión”, comentó la joven con entusiasmo tras su triunfo.

Sin embargo, Julieta Poggio podría pasar un incómodo momento si los restantes participantres de Gran Hermano deciden dejar en placa a Romina y Daniela, sus dos incondicionales aliadas dentro de la casa. En ese caso, la líder de la semana debería elegir entre una de sus amigas para rescatar de la nominación, situación que sin dudas la pondría en una tensa situación.