Presenta:

"Vidas Robadas" tuvo un final emocionante en el teatro Ópera

Con picos de 35 puntos de rating y un final emotivo, truculento y feliz, la tira combinó ficción y realidad en una trama centrada en la trata de personas, se despidió a sala llena con un elenco que abogó por justicia ante un público eufórico. Entrá y mirá cómo fue el final de la novela del año.
El actor Facundo Arana, al ingresar anoche al teatro Opera de la Ciudad de Buenos Aires. Foto: NA
El actor Facundo Arana, al ingresar anoche al teatro Opera de la Ciudad de Buenos Aires. Foto: NA

"Estos son los desaparecidos del presente y tenemos que luchar porque esto no tiene que suceder nunca más", dijo Jorge Marrale, quien se lució en la piel del perverso Astor Monserrat y sintetizó así el espíritu comprometido de una historia que, escrita por Marcelo Camaño y Guillermo Salmerón, puso sobre el tapete el secuestro de personas para la prostitución.

Luego de intrigas, traiciones y asesinatos que hasta el último capítulo (fueron 130 en total) le imprimieron una gran dosis de acción y suspenso a la novela también protagonizada por Facundo Arana (Bautista) y Soledad Silveyra (Rosario), el relato llegó a una "final del corazón", según definió el mismo Claudio Villarreal.

En la ficción, Juliana (Sofía Elliot), personaje inspirado en Marita Verón, una de las víctimas de tráfico y trata de personas y aún desaparecida, fue rescatada finalmente por Bautista, quien cuando ya estaba dado por muerto reaparece para quedarse con su amor, Ana (Mónica Antonópulos).

 


"Esta historia terminó bien, encontramos a Juliana", dijo una emocionada Solita con el micrófono en mano y tras la proyección el episodio (que se extendió por una hora y media).

"Ahora vamos todos a encontrar a Marita Verón", sostuvo para luego abrazar a Susana Trimarco, madre de la joven que hoy tendría 28 años. 

Aquí te mostramos uno de los tramos del desenlace de la tira, ocurrido en el capítulo final que se emitó anoche.

El último capítulo de la ficción cerró una historia que atrapó a sus fieles seguidores desde un principio, el mismo supo conjugar suspenso, drama, acción y amor. Por lo que en este envío, los televidentes fueron testigos de la búsqueda desesperada de Bautista por encontrar a su mujer (Ana) y recuperar a Juliana.

 

Casi sin esperanzas por encontrar viva a Ana, Bautista encuentra a Nicolás y Juliana y los sigue hasta una fábrica abandonada con la intención de descubrir donde está enterrada su mujer. Allí finalmente la hija en la ficción de Soledad Silveyra, le confiesa a su malvado raptor lo mucho que lo odia.

 

Por esta confesión, el personaje de Juan Gil Navarro intenta asesinar a Juliana, y por este hecho aparece Bautista a rescatarla, ambos actores se trenzan en una pelea que termina en un altísimo puente, por donde Nicolás se tira, suicidándose, sin decir donde tiene enterrada a Ana.

 

Tras una búsqueda desesperada, y con la ayuda de Juliana, Bautista finalmente encuentra a su mujer, sin preveer ninguno de los dos que el malvado Nicolás los observa y descargando todo su odio dispara contra Bautista, pero en ese mismo momento la Policía lo acribilla y le da muerte no sin antes volver a disparar contra Arana, quien aparentemente también muere.

 

La historia, luego de esta escena comienza a cerrar el resto de las historias, donde la más conmovedora es el regreso del personaje de Solita a su pueblo junto a su hija. Y la más dramática es la muerte de Astor en manos de Dante.

 

Los últimos minutos de la tira muestran el casamiento de Favio, el mejor amigo de Bautista, quien no puede unirse a Alejandra hasta que no llegue el testigo de la boda, que tras segundos de suspenso termina siendo Bautista quien reaparece custodiado por la Policía.

 

Luego del casamiento, los personajes principales (Arana y Antonópolus) que han cambiado de identidad por protección, se despiden de todos sus seres queridos y se marchan del país en busca de una nueva vida.    

Una conmovida Trimarco agradeció a Telefé Contenidos por encarar una tira que "sirvió muchísimo para que la gente sepa que esto puede estar oculto detrás de una familia normal", en lo que marcó uno de los momentos más emocionantes de una noche que comenzó a las 21 con la alfombra roja y terminó a la 1.30 con el todo el elenco y el equipo técnico en el escenario del Opera.

Los malos de la novela.

Con Mariano Peluffo en la conducción y Facundo Arana como una suerte de anfitrión, los seguidores de "Vidas robadas" disfrutaron de un desenlace con todos los ingredientes del género policial y en el que los más ovacionados fueron los más malos.

Dante (Adrián Navarro), quien luego de la traición de Astor termina matándolo, y Nicolás (Juan Gil Navarro), que después de un supuesto suicido es finalmente acribillado por la policía, se llevaron los aplausos y los suspiros de las jóvenes que gritaban cuando aparecían en la pantalla.

Con la participación de Guillermo Francella y Jorge Lanata, la tira nocturna que profundizó el camino que había inaugurado "Montecristo" en cuanto a la decisión de incluir temas vinculados a los derechos humanos, tuvo un final a su altura.

Más allá del destino feliz de algunos personajes e incierto o trágico en otros casos y de la frivolidad que puede detonar una fiesta televisada en la que no faltaron los papelitos metalizados, los actores se mostraron felices por abordar una problemática social.

"La gente ahora sabe de qué se trata todo esto. Nosotros sólo pudimos contar el 10 por ciento de la realidad, porque es muy terrible", concluyó Arana.