El Nissan Qashqai fue sometido a las pruebas de choque: ¿cómo le fue?

A nivel mundial, Nissan comercializa una amplia gama de SUV y crossover. Dentro de ese catálogo se encuentra el Qashqai, un modelo que ya va por su tercera generación, aunque en Estados Unidos todavía se comercializa la segunda bajo la denominación Rogue Sport. 

Pero volviendo al Qashqai, en este caso el SUV mediano sometido a las pruebas de choque de Latin NCAP, con buenos resultados. El producto fabricado en el Reino Unido para diferentes mercados europeos alcanzó 5 estrellas, gracias a que logró un puntaje elevado de 93,65% en la protección a ocupantes adultos y un 92,02% en el caso de niños. A su vez, se destacó en las asistencias a la seguridad, con un resultado de 85,93%. 

Cabe destacar que las pruebas a las que fue sometido el Nissan Qashqai fueron impacto frontal, lateral, de poste y latigazo cervical, también llamado ‘whiplash’. A eso se suma la evaluación de protección a peatones y las pruebas que verifican el funcionamiento de los asistentes como el control de estabilidad y el frenado automático de emergencia. 

El Nissan Qashqai presentó su tercera generación en febrero de 2021. En esta última evolución, el SUV comparte plataforma con modelos como Renault Austral o Nissan X-Trail, pero en este caso de produce únicamente en la planta de Sunderland. La generación anterior todavía sigue vigente con un leve rediseño en mercados como el norteamericano. 

La gama de motorizaciones se destaca por la ausencia de alternativas diésel. En su ligar, cuenta con una variante híbrida ligera que se conforma por un 1.3 turbo que se ofrece con dos potencias, 140 o 158 CV. La transmisión es una caja manual de seis velocidades y la tracción es delantera, salvo en la versión más potente que utiliza un sistema de tracción total y caja automática CVT. 

Por su parte, el motor más eficiente y moderno incorpora la tecnología e-POWER. Se trata de un motor 1.5 turbo con 155 CV que en lugar de “mover” al auto, funciona como generador para alimentar una pequeña batería. Por eso, las ruedas se mueven gracias a la acción de un motor eléctrico de 190 CV, por lo tanto en líneas generales se trata de un vehículo 100% eléctrico, con todo lo que eso implica. En teoría, la ventaja es que el motor término trabaja de forma estacionaria a un determinado rango de revoluciones, lo que contribuye a una mayor eficiencia general.