Daños del sol en el pelo: cómo evitar la sequedad y la decoloración
El cabello también sufre los efectos del sol. La exposición prolongada a los rayos UV puede alterar su color, volverlo más frágil y resecar el cuero cabelludo. Conocé cómo protegerlo y mantenerlo sano durante todo el año.

El cabello hay que protegerlo todo el año, no solo en verano.
CanvaEl sol no solo afecta la piel: el pelo también recibe su impacto directo. Durante los meses más cálidos, la radiación ultravioleta, el viento, el agua salada y el cloro pueden alterar la estructura capilar, dejando el cabello más seco, poroso y quebradizo.
La exposición continua al sol degrada las proteínas que mantienen la fibra capilar elástica, además de oxidar la melanina, lo que provoca una pérdida de color y brillo natural. Por eso, quienes tienen el cabello teñido suelen notar un desvanecimiento más rápido del tono, especialmente en las puntas.
Te Podría Interesar
El cuero cabelludo también puede sufrir. La radiación directa puede irritarlo, producir descamación e incluso quemaduras leves, especialmente en personas con cabello fino o zonas despobladas.
Cómo proteger el cabello del sol
Existen varias estrategias sencillas para minimizar el daño solar:
- Usar protectores capilares: al igual que la piel, el cabello también necesita una barrera frente a los rayos UV. Los sprays o cremas con filtros solares ayudan a conservar la hidratación y proteger el color.
- Cubrir la cabeza: un sombrero de ala ancha, pañuelos o gorras son aliados perfectos para reducir la exposición directa al sol.
- Evitar el exceso de calor: combinar radiación solar con planchitas o secadores puede potenciar el daño. Siempre es recomendable aplicar productos termo protectores antes de usar herramientas de calor.
- Enjuagar el pelo después de nadar: el cloro y la sal del mar resecan y dañan la fibra capilar. Enjuagarlo con agua dulce y aplicar un acondicionador hidratante ayuda a restaurar el equilibrio.
- Incorporar tratamientos nutritivos: mascarillas con aceites naturales (como argán, coco o almendra) y productos ricos en queratina o proteínas fortalecen el cabello desde la raíz hasta las puntas.
Señales de daño solar en el cabello
- Falta de brillo o aspecto opaco.
- Textura áspera o sensación de “pelo pajizo”.
- Puntas abiertas o quiebre al cepillar.
- Decoloración o pérdida del tono natural.
- Cuero cabelludo sensible o reseco.
Cuando estas señales aparecen, lo ideal es espaciar los lavados, usar shampoo suaves sin sulfatos y reforzar la hidratación.