Las camas anti sexo en los Juegos Olímpicos de París 2024: hay polémica
En la Villa Olímpica de París 2024, los atletas se enfrentan a un desafío inesperado: camas de cartón diseñadas para evitar encuentros íntimos. Para algunos es innovador, para otros, represivo.
La Villa Olímpica recibió a los atletas con una sorpresa inusual: las polémicas camas anti sexo. Estas camas, hechas de cartón, fueron impuestas por el comité organizador para prevenir encuentros íntimos entre los deportistas.
Estas camas están diseñadas para ser reciclables y sustentables, una medida ecológica en línea con la tendencia global de reducir el impacto ambiental de grandes eventos. Cada cama puede ajustarse a la altura y peso del atleta mediante una aplicación móvil, pero su principal característica es su limitada resistencia, incapaz de soportar movimientos bruscos o el peso de más de una persona.
Desde su introducción en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, estas camas han generado controversia. Algunos atletas cuestionaron su durabilidad y comodidad, llevando a algunos a grabar pruebas para demostrar si realmente podían soportar hasta 200 kg, como afirmaban los organizadores. Estas pruebas incluyeron movimientos bruscos y saltos, mostrando que las camas no estaban diseñadas para soportar tanta actividad.
Son más de 10.000 los deportistas alojados en 82 edificios y 7.200 habitaciones, desde el 26 de julio hasta el 11 de agosto. Esta masiva logística también ha incluido otras comodidades y medidas de seguridad para garantizar el bienestar de todos los participantes durante el evento deportivo más grande del mundo.
Las camas anti sexo de París 2024 son una curiosidad más en la rica historia de los Juegos Olímpicos. Mientras algunos ven en ellas una medida necesaria y ecológica, otros las perciben como una incomodidad añadida en un evento ya de por sí exigente.