El extraño motivo por el que Carolina de Mónaco no se divorcia

Carolina de Mónaco y Ernesto de Hannover se casaron en una ceremonia muy íntima en 1999 y fruto de esta relación nació Alejandra de Hannover, quien ostenta el título de princesa. La pareja se separó hace muchos años, pero aún siguen casados y el motivo está vinculado a la herencia de la royal de Mónaco.

En 1990, la primogénita de Raniero III y Grace Kelly sufrió la enorme pérdida de su esposo, Stéfano Casiraghi, con quien tuvo a sus tres hijos mayores, Pierre, Andrea y Carlota. El italiano murió víctima de un accidente al chocar su embarcación contra una ola cuando pretendía revalidar su título de campeón del mundo de off-shore.

Luego de esta tragedia, Carolina de Mónaco y sus hijos se trasladaron a vivir a Saint-Rémy-de-Provence y durante mucho tiempo estuvieron lejos de la mirada pública para atravesar el duelo. Una de las personas que la acompañó este tiempo fue su amigo de la infancia, Ernesto de Hannover, quien en ese entonces estaba casado con Chantal Hochuli.

En 1996 comenzaron a surgir los rumores de una posible relación entre los amigos, ya que se los vio juntos visitando distintos lugares del mundo como Nueva York y Londres. Al año siguiente, Hochuli le pidió el divorcio al jefe de la depuesta Casa Real de Hannover, con quien tuvo dos hijos, Ernesto Jr. y Christian.

¿Siguen juntos Carolina de Mónaco y Ernesto de Hannover?

La pareja tuvo una boda de perfil muy bajo en el palacio de Montecarlo por un motivo que se conoció más tarde: Carolina de Mónaco, de 42 años, estaba embarazada. Alejandra de Hannover nació 6 meses después del casamiento en Vöcklabruck, Alta Austria, Austria, y se encuentra en la línea sucesoria del trono de Mónaco dado que actualmente profesa la religión católica.

La relación entre royals no prosperó y finalmente se separaron en 1996, pero aún siguen estando casados. El motivo está vinculado a los problemas que tuvo Ernesto de Hannover con Ernesto Jr., quien actualmente tiene 43 años y mantiene una relación muy cercana con Carolina de Mónaco.

Ernesto Jr. tuvo problemas de adicciones y su padre no está de acuerdo en cómo administra la herencia que le tocó. Una de las peleas más fuertes que tuvieron fue cuando el primogénito quiso vender el castillo de Marienburg, ubicado en Pattensen, Alemania, un regalo que le hizo Ernesto de Hannover en 2004.

 

El estado alemán de Baja Sajonia quiso comprarlo, pero el jefe de los Hannover envió una carta para impedir la transacción alegando que su venta era "ilegal e indigna" y que su hijo cometió un acto de "gran ingratitud". "Ya no podía seguir haciéndome cargo de los gastos", se defendió el heredero.

También subastó tesoros de la Casa Real, dinero con el que pagó muchas deudas y, además, su actitud violenta lo llevó a ser detenido en varias ocasiones. Pese a todo esto, Carolina de Mónaco le guarda un gran cariño y decidió no divorciarse de Ernesto de Hannover para que Ernesto Jr. pueda heredar algunos de sus bienes de Mónaco, los cuales están en el testamento de la princesa.

Teniendo en cuenta que es el hermano de su hija Alejandra, la royal monegasca quiere que el heredero siga formando parte de la familia. Así lo demostró en el casamiento de su hermano Alberto II con Charlene en 2011, al que invitó a su hijastro e incluso se sentó en una de las primeras filas.

¿Qué te parece la actitud de Carolina de Mónaco?