Aprende a preparar unos exquisitos bisquets caseros en simples pasos

La receta casera para hacer unos esponjosos, tradicionales y sabrosos bisquets está aquí. Esta preparación de origen mexicano gusta a grandes y chicos, suele ser la merienda perfecta o un aliado a la hora de los snacks caseros. 

Ideales para días de lluvia o para acompañar un momento de encuentro familiar o entre amigos, son pocas las personas que cuando los prueban no les gustan ¡Y es que son deliciosos!

Los bisquets son una práctica gastronómica y cultural que comienza en otoño, porque es un alimento algo calórico y contundente, ideal para el momento de la tarde, en donde hay que recobrar fuerzas para llegar al fin de las jornada laboral o conformar a los niños que tienen hambre antes de la cena. 

Si eres de México o has pasado por sus tierras, sabes que cuando comienza la temporada de lluvias todas las casas saborean un bisquet para pasar el rato, con una preparación líquida y caliente que puede ser un té de hierbas u otra. 

Este panecillo dulce tan característico de México tiene que ser uno de tus favoritos una vez que lo pruebes ¡Ya verás!

¿Qué sabor tienen los bisquets caseros?

Aunque los bisquets chinos (¡sí, los del corto de Disney!) tienen su fama de exquisitos, no dejes de probar estos mexicanos: serán el éxito de tu mesa de la tarde. Dicen que esta preparación, de hecho, la trajeron inmigrantes chinos a México, que modificaron una receta original según los ingredientes locales ¡maravilloso!

¿Por qué? Porque este pan dulce, parecido a los scones ingleses y al pan de soda, combina con casi todo. Desde palta, pollo desmenuzado, manteca o mermelada. Usa tu imaginación sobre ellos y no te arrepentirás. 

Desayunos, aperitivos, almuerzos: verás lo útiles que te resultan estos bisquets caseros ¡A prepararlos!

Ingredientes:

• 500 gramos de harina de trigo
• 4 cucharadas de polvo para hornear
• 1 cucharadita de sal
• 150 gramos de azúcar
• 150 gramos de margarina o manteca de cerdo
• 250 ml de leche
• Aceite en aerosol
• 2 huevos

Preparación:

En un bol, mezcla los ingredientes secos. Luego, integra la grasa a temperatura ambiente (margarina o manteca de cerdo, que puede ser en polvo) y por otro lado, bate en un bol la leche con un huevo. 

Mezcla la preparación anterior y forma una masa homogénea. 

Extiende luego la masa con ayuda de un rodillo enharinado, igual que la superficie. 

Corta los bisquets con 2 cm de ancho y marca un círculo menor en la parte del medio con la tapa de una gaseosa. Cada pieza irá a una fuente engrasada con aceite de aerosol. 

Barniza cada uno de los bisquets con el otro huevo. Y luego, hornea a 180 grados unos 20 a 25 minutos. Deja enfriar y envuelve en plástico o film para que duren más. Se pueden freezar y consumir en el momento con un breve paso por el horno. 

¡A disfrutar de tus bisquets caseros!

Este contenido se publica solo con fines informativos y no puede sustituir la labor de un profesional. Le recomendamos que consulte con su Nutricionista de confianza.

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