Parece Irlanda, pero está en Argentina: la tranquila villa turística para visitar el fin de semana largo

El próximo fin de semana largo llega con dos feriados, una oportunidad perfecta para recorrer el país y explorar destinos nacionales. En Tucumán, una tranquila villa turística que se encuentra a pocos kilómetros de la ciudad cabecera se destaca por su singular belleza con cerros de abundante vegetación y construcciones de estilo neogótico.

Este paisaje hogar de construcciones de piedra que parecen castillos de cuento y lomas verdes con hermosas flores que lo decoran, da la sensación que uno está en un paisaje de Irlanda. Es un destino elegido por una gran cantidad de turistas a lo largo de todo el año. Se trata de Villa Nougués, se caracteriza por su belleza y la paz que hay en sus calles.

Tucumán es una provincia que posee algunos de los paisajes más variados de Argentina; además, tiene la ventaja de tener distancias cortas, cada uno de los circuitos turísticos que ofrece invita a vivir una experiencia única entre la historia que guarda la ciudad y la magia de su cerros, valles, vegetación y sus diques.

Villa Nougués, el pueblo argentino que parece Irlanda

Este pequeño poblado de Tucumán fue uno de los primeros en la provincia. Nació en el año 1899 con la construcción de la casa de veraneo del ingeniero Luis F. Nougués, quien fue un importante empresario azucarero y luego se convirtió en el gobernador de la provincia.

Fue a partir de la construcción de esa primera casa, que importantes familias de Tucumán comenzaron a invertir en imponentes casas de veraneo que categorizaron la villa. Al imponente paisaje natural se le suman construcciones que llevan a pensar que uno se encuentra en un cuento; uno de los edificios más icónicos es la capilla de estilo neogótico y singular belleza construida en el año 1918.

Además, en Villa Nougués es posible visitar sus chalets rodeados de árboles y lomas que invitan al turista a explorar la villa de punta a punta y su ex hostería, actualmente funciona un restaurante y salón de fiestas donde es posible experimentar los sabores de comidas regionales.

El pueblo en general tiene un clima agradable, con veranos cálidos e inviernos frescos, pero en ambas estaciones las temperaturas son moderadas, lo que hace que cada paseo y actividad al aire libre resulta muy agradable.