Máxima de los Países Bajos impacta con una joya única
El despliegue de lujo y elegancia de Máxima de los Países Bajos dejó a todos los invitados boquiabiertos en la cena de gala en honor al presidente de Italia. Fue en el palacio real de Amsterdam. Se trata de un collar de perlas de 5 vueltas, y en esta nota te contamos más detalles.
El pasado 9 de noviembre, los reyes de Holanda recibieron al presidente de Italia, Sergio Mattarella, y a su hija en la plaza Dam de Ámsterdam. Como es costumbre, por la noche ofrecieron una cena de gala en su honor en el Palacio Real.
La reina Máxima de los Países Bajos se lució con su elegancia y glamour a la que nos tiene acostumbrados no tanto por el vestido que escogió, sino por la bellísima elección de alhajas que sacó de su joyero real: un collar de perlas de cinco vueltas y una de las tiaras más espectaculares de la colección real, la de Oriente.
Perlas y diamantes: los favoritos de Máxima de los Países Bajos
La reina Máxima no reparó en elegancia para recibir al presidente italiano y a su hija. Se lució con un vestido de la colección de su diseñador de cabecera, Jan Taminiau, y lo combinó con un espectacular collar de perlas de cinco vueltas que iba a la perfección con el resto de su atuendo.
También acompañó su look con pendientes y anillos a juego. El tono frambuesa de sus labios y de su manicura le daban el toque de color a este regio estilismo, un clásico de la royal holandesa.
Lo que más llamó la atención de la noche fue la magnífica tiara de Oriente, una pieza confeccionada con diamantes, 35 perlas redondas y 11 con forma de lágrima. Esta majestuosa joya fue creada para la reina Guillermina en 1897, un año antes de las celebraciones por su coronación, y se puede llevar de cuatro maneras diferentes, con más o menos perlas y más o menos altura.
La reina Juliana creó una fundación familiar con las joyas de la familia real para asegurarse de que nadie pudiera vender o dejar en herencia ciertas piezas y esta tiara es una de ellas. Máxima de los Países Bajos ya lució esta espectacular pieza en varias ocasiones, combinándola con el mismo vestido que llevó en su encuentro con el presidente italiano y en la cena de gala que se celebró durante su visita a Japón en 2014.
El discurso del rey
En el discurso de la noche, el rey Guillermo hizo un alegato sobre Europa y lo que significa pertenecer a la Unión Europea. También habló sobre el crimen organizado y le agradeció la presencia al presidente italiano.
El monarca manifestó: “Para los dos, este es un tema con una dimensión personal. Los Países Bajos están deseando aprender de usted. Así que estoy agradecido de que haya ofrecido su ayuda, y de que ahora estemos trabajando juntos”, en una posible alusión a las amenazas que está sufriendo su hija, la princesa Amalia, que la han llevado a abandonar su idea inicial de vivir en un piso de estudiantes teniendo que volver a la residencia familiar.