Una bodega argentina levantará un edificio para la comunidad del lugar

En Colomé, pueblo ubicado en los Valles Calchaquíes, los viñedos de altura imprimen la identidad del terruño, con suelos áridos, clima extremo y donde el ímpetu de la naturaleza domina el paisaje salteño.  En este lugar, se emplaza el Grupo Colomé, una empresa comprometida con la sostenibilidad y el bienestar de toda su comunidad, en la que viven unas 56 familias. 

“La sustentabilidad es un elemento clave para el desarrollo y el éxito. En equipo, dirigimos nuestras acciones hacia el progreso y la innovación, con el fin de generar impactos positivos en el ambiente, en la gente y los negocios. La pasión por lo que hacemos, nuestro compromiso por la calidad, transparencia e integridad constituyen un excelente punto de partida y la base para seguir trabajando para un mejor futuro”, explicó Matthieu Naef, CEO de Grupo Colomé.

Desde 2001, Donald y Ursula Hess, fundadores del grupo, se propusieron trabajar codo a codo con la mano de obra local y aportar a la economía de la zona. “Creemos en apoyar a la comunidad local en todas las formas posibles”, sostienen. Tal es así que unas 30 familias tienen alguna vinculación con la bodega o trabajan en el hotel. A lo largo de los años, esta visión ha funcionado como motor de proyectos y la Fundación ha impulsado acciones para mantener vínculos estrechos con la comunidad, con un objetivo común: mejorar la calidad de vida de los habitantes de la zona.

Con la política de Responsabilidad Social como eje, se avanzó en la construcción de un Salón de Usos Múltiples (SUM) que permitirá a los habitantes de Colomé disfrutar de un espacio de recreación, deporte y actividades culturales. El edificio estará listo para el segundo semestre de 2022. Los acuerdos relacionados al uso de este espacio, fueron fruto de una construcción colectiva a través de una Mesa de Diálogo, una herramienta clave para el trabajo colaborativo entre la empresa y la población; que fomenta la responsabilidad compartida en el uso y cuidado del futuro espacio.

La concreción del nuevo SUM es parte del Plan de Desarrollo Social que consta de una serie de programas orientados a dar respuestas a las necesidades de la comunidad, con foco en educación, a través de talleres de apoyo escolar y de alfabetización de adultos; en el área cultural se busca reflotar el ballet folklórico; además hay campeonatos deportivos y una colonia de vacaciones para los chicos de la zona. 

En área de salud comunitaria se dictan talleres de reconocimiento y recolección de plantas medicinales y frutos silvestres comestibles, también se creó un herbario y se está trabajando en la reconstrucción de la memoria colectiva en relación a los usos de esas plantas que se fueron perdiendo con el paso de los años. 

Las acciones destinadas a generar conciencia sobre el consumo responsable son relevantes en el trabajo con la comunidad. Hoy, las nuevas generaciones que participaron durante años en este tipo de actividades han podido culminar sus estudios y construir un futuro mejor.