El Gobierno puso en marcha el proceso de privatización de AySA
El gobierno publicó el decreto que dispone el proceso de privatización de AySA, la empresa de aguas del área metropolitana de Buenos Aires, en un plazo de ocho meses. La licitación será por el 90% de las acciones.

El Gobierno argentino acelera con las privatizaciones de las empresas del Estado con la puesta en marcha del proceso de privatización total de la empresa estatal de agua AySA. La decisión fue formalizada mediante la Resolución 1198/2025 del Ministerio de Economía, publicada en el Boletín Oficial.
El proceso de privatización se realizará a través de una licitación pública nacional e internacional, en la que se venderá el 90% de las acciones en manos del Estado y al menos el 51% del paquete accionario se le entregará a un operador estratégico para que opere el servicio. El resto de las acciones se venderán en los mercados y bolsas del país. El proceso deberá completarse en un plazo máximo de ocho meses.
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La Unidad Ejecutora Especial Temporaria "Agencia de Transformación de Empresas Públicas" será la encargada de coordinar las acciones necesarias para la privatización, con la supervisión de la Secretaría de Obras Públicas. Para la valuación de la empresa, se contratará a una entidad bancaria del sector público nacional, ya que el Tribunal de Tasaciones de la Nación no puede realizar esta tarea en un plazo razonable.
La resolución también establece que la privatización no afectará la continuidad del servicio público de agua potable y saneamiento en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
Las idas y vueltas de la empresa de agua
El servicio de agua potable para el área metropolitana de Buenos Aires nació a fines del XIX para combatir epidemias como la de cólera, aunque la creación de Obras Sanitarias de la Nación (OSN) se realizo en 1912 para la provisión de agua y saneamiento en todo el país.
El servicio de OSN para el AMBA fue privatizado en 1993 con la concesión por 30 años a la empresa Aguas Argentinas, un consorcio liderado por el grupo francés Suez. Sin embargo, la falta de inversiones y el mal manejo derivó en la reestatización y creación de AySA en 2006 con un 90% en manos del Estado Nacional y otro 10% en manos de los trabajadores.
La privatización actual se lleva adelante a partir de la autorización que el Congreso le dio al Estado tras la sanción de la Ley 27742, denominada ley Bases.