A 90 años del Banco Central de la República Argentina: ¿una institución necesaria?
El 28 de marzo de 1935 se sancionó y promulgó la ley 12.155 que aprobó la creación del Banco Central.

El Banco Central se creó en 1935
Noticias ArgentinasEl 28 de marzo de 1935 se sancionó y promulgó la ley 12.155 que aprobó la creación del Banco Central de nuestra República, siendo inaugurado el día 6 de junio del mismo año. A 90 años de funcionamiento, esta institución financiera es objeto de críticas. Entonces, consideramos oportuno realizar un recorrido histórico sobre el propósito de la creación del Banco Central, y el contexto en el que se produjo.
Para comprender la necesidad de establecer un Banco Central en la Argentina de la década de 1930, es imprescindible atender a las coyunturas nacional e internacional, así como los interesantes cambios a nivel ideológico.
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En primer lugar, es importante aclarar que antes de la década de 1930 en Argentina, ya se había manifestado la necesidad de modernizar e institucionalizar la política monetaria, que implicaba el control y la organización del sistema bancario. El sistema por entonces vigente era inflexible e insuficiente en épocas de crisis, así como en períodos de relativa tranquilidad, lo que producía fuga de oro, devaluación o la emisión de forma incontrolada.
Si bien hubo proyectos desde los gobiernos radicales, estos no lograron la aprobación en el Congreso. También había instituciones que ya participaban del sistema monetario y financiero, el Banco de la Nación y la Caja de Conversión, entre otros, aunque insuficientes. En efecto, de acuerdo con Patricio Liddle y Juan José Pila (2010), un sistema monetario desorganizado y anárquico exigía para su buen funcionamiento la creación de un ente regulador, lugar ocupado en el mundo por los bancos centrales.
Ya en la década del 30 encontramos un panorama de cambios mundiales que afectará a Argentina, no solo en términos de efectos económicos adversos sino, también, en las propuestas y planes respecto del rol que debía asumir el Estado frente a la crisis, es decir, de mayor regulación e intervención de la economía. Esto permite comprender por qué el proyecto radical que había sido desestimado en los años ‘20 fue implementado en los ‘30.
En otras palabras, a partir de la crisis del capitalismo mundial, el Estado se vuelve intervencionista. En consecuencia, una de las medidas económicas implementadas por el gobierno de Agustín P. Justo fue la creación de un ente regulador que modificara el sistema de la Caja de Conversión, a fin de regular la moneda fluctuante y el crédito, de forma que se adaptara a las necesidades de la actividad económica argentina y otorgara mayor estabilidad al sistema.
Estas propuestas y políticas encontraban asidero en el declive del pensamiento librecambista que dio lugar a los postulados de John M. Keynes a partir de las crisis del ´29. Este pensamiento, también fue recepcionado en Argentina por Raúl Prebisch (1901-1986), economista y político relevante del período quien no solo realizó el proyecto del Banco Central que finalmente se aplicó sino que, además, fue el gerente general de la institución financiera por varios años.
En ese sentido, tomando como punto de partida las ideas anticíclicas de Keynes, Prebisch concibió a la nueva institución como un instrumento flexible. Esto significa que durante los momentos de depresión aplicaría políticas monetarias expansivas, y durante los momentos de expansión, políticas contractivas.
Las funciones que cumplió y cumple el Banco Central (que hasta 1946 fue una institución mixta que incluyó al Estado nacional y a bancos privados argentinos y extranjeros), son las de emitir billetes, mantener una reserva que asegure el valor del peso, y regular la cantidad de crédito y medios de pago, adaptándolos al volumen real de los negocios a través del redescuento en el sistema bancario.
También es interesante observar la repercusión que tuvo la creación del Banco Central ya que los mismos que se negaban a la constitución de dicho organismo en el Congreso, durante los gobiernos radicales de la década anterior, fueron quienes en 1935 aprobaron el proyecto. Este cambio de perspectiva permite observar la necesidad de resoluciones prácticas por parte de quienes gobernaron.
Sin embargo, el Banco Central también generó una oposición en diferentes círculos: liberales representados por el diario “La Prensa” y el radicalismo antipersonalista, los partidos políticos socialista y demócrata progresista, nacionalistas, FORJA e incluso el asesor legal del Banco de la Nación. Pese a ello, en el discurso inaugural del Banco Central, el presidente Agustín P. Justo, repitiendo las palabras del ex presidente Carlos Pellegrini en la inauguración del Banco de la Nación, dijo que la fundación del “Central” era imprescindible para regular el sistema financiero frente al impacto de la crisis económica mundial en la economía nacional.
Como reflexión final, la historia económica argentina hace evidente que la creación de organismos centrales y reguladores nacen, por lo general, en tiempos de crisis, y se muestran como instrumentos necesarios para sobrellevar las situaciones económicas graves. En ese sentido, la creación del Banco Central mostró su relevancia de la mano de Raúl Prebisch, quien estuvo a cargo de la gerencia hasta 1938, con su política anticíclica. Pero también enseña que esas mismas instituciones técnicas, una vez cumplido su objetivo inicial, pueden avanzar y complejizar su funcionamiento con vistas a dotar al sistema de mayor estabilidad y sostenibilidad en el tiempo.
Por eso, es importante considerar si el cierre de tal organismo regulador es conveniente en un mundo sumido en crisis. En todo caso, sería ingenuo pensar que un período de estabilidad económica y financiera es perpetuo. En su lugar, sería conveniente prestar atención a las necesidades de la coyuntura actual para que la institución financiera pudiera ofrecer respuestas coherentes y concretas. Como en la crisis del 2008, cuando el Banco Central implementó políticas anticíclicas proveyendo liquidez al sistema bancario ante la caída de los depósitos del sistema financiero (Rougier, 2018).
Autora: Baez Nahir, integrante del Instituto de Historia Americana y Argentina, FFYL- UNCuyo.