Qué hay detrás del derrumbe de los dólares alternativos al menor nivel en siete meses
La pax cambiaria se mantiene sin cambios y el Gobierno lo celebra. Expectativas por la negociación de un nuevo programa con el Fondo Monetario Internacional.
Es probable que ni siquiera el presidente Javier Milei ni su equipo económico imaginaran hace un año que el mercado cambiario estaría tan tranquilo y con una fuerte tendencia a la revaluación del peso.
Este miércoles el dólar informal cotiza a $1055 para la compra y $1085 para la venta, una baja de 0,46% respecto del cierre anterior, mientras que el MEP o Bolsa cotiza a $1076,07, quedando son cambios y lo mismo que el Contado con Liquidación que cotiza a $1107,52.
Así los dólares alternativos, tanto el blue como los financieros, registrados los valores más bajos desde mayo pasado. El informal tocó los $1070 por unidad el pasado 14 de mayo, mientras que el CCL cerró en $1099,30 el 16 de ese mes y el MEP en 1072,12 el 17, aunque este lunes 2 de diciembre terminó por debajo de ese valor, en 1068,89.
Fuentes del mercado sostienen que la tendencia está firme, festejando la fuerte reducción de la brecha cambiaria, hoy en torno al l7% entre blue y el dólar mayorista, el tipo de cambio oficial que se utiliza para para pagar importaciones y liquidar exportaciones. Por su parte, la brecha entre el Contado con Liqui y el MEP está en el 3%, con lo cual "estamos muy cerca de la convergencia cambiaria", aseguran desde Rava Bursátil.
Una combinación de factores está detrás de esta pax cambiaria. Por un lado, el éxito del blanqueo de capitales, que acercó a los bancos más de 20.000 millones de dólares, y que en su mayor parte quedaron depositados, llevando el nivel de depósitos en dólares a unos US$ 33.000 millones.
Por otro lado, y en alguna medida vinculado al blanqueo, la fuerte baja del riesgo país a niveles de 750 puntos básicos, el nivel más bajo desde marzo de 2019. La aversión al riesgo argentino dio paso a una relativa confianza en que esta vez el orden de las cuentas públicas va en serio.
En este contexto, la reducción de la inflación a niveles por debajo del 3% parece convencer al mercado, que se está volcando a los títulos argentinos. Al respecto, el Gobierno ya anunció que ya le compró al Banco Central los 3500 millones de dólares para hacer frente al pago del 9 de enero.
Y la buena noticia es que lo hizo con superávit financiero, sin apelar a refinanciación, roll over ni otras argucias financieras. Son 2300 millones de dólares y unos 1300 de intereses de los bonos Global y Bonar en dólares en emitidos en la reestructuración de deuda con los inversores privados en agosto de 2020.
Por último, la creencia de que el Gobierno no negociará el equilibrio fiscal y el déficit cero. En este escenario el Gobierno también está negociando un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que supondrá nuevos desembolsos, por lo que el frente externo estaría "bajo control". Todo esto mantiene a raya la cotización de los dólares alternativos y el Gobierno lo festeja.