Qué se dice en el sector empresario tras el resultado de las elecciones
El mapa político argentino cambió ayer y surge una etapa de incertidumbre hasta el balotaje en noviembre. En las empresas reacomodan sus estrategias tras la primera vuelta electoral.
El final abierto y sorpresivo que dejó el resultado de las elecciones de este domingo genera un escenario de cautela en el mundo empresario.
Después del clima triunfalista en favor de Javier Milei, que se vivió durante las últimas semanas y que hacía pensar que la economía marcharía irremediablemente hacia las ideas que pregona La Libertad Avanza, el triunfo claro en la primera vuelta de Sergio Massa obliga a replantear el horizonte.
No es porque en el mundo de los negocios tuviera una preferencia marcada hacia el candidato que se había impuesto en las PASO, sino porque su ratificación hubiera implicado tener un panorama más preciso sobre el país que viene y no extender un mes más la incertidumbre.
Panorama incierto
“Hoy estamos igual que la semana pasada, en cuanto a la expectativa por lo que puede pasar, pero con las mismas dudas. Las elecciones despejaron poco el camino”, dijo a MDZ un empresario del sector autopartistas.
Está claro que los dos candidatos que competirán en el balotaje generan mayor imprevisibilidad sobre las líneas que marcarán los próximos cuatro años.
Juntos por el Cambio, más allá de los gustos políticos, era la propuesta que brindaba el futuro más predecible. No impulsaba idea rupturistas en lo económico y se plantaba contra las ideas más populistas que encarna el kirchnerismo.
Su referente económico, Carlos Melconian, se cansó de explicar el camino a seguir y se basaba en planteos más racionales y apelando al sentido común. Ni dolarización ni festival de subsidios.
“Con Patricia Bullrich y Melconian se sabía hacia dónde íbamos. No estoy haciendo un juicio de valor sobre sus propuestas, sólo remarcó las características principales. Búsqueda de equilibrio fiscal, integración al mundo promercado y posiciones menos extremas para un lado y para el otro. Esa opción ya no está. Ahora habrá que esperar para ver hacia dónde vamos. Para las empresas son importantes las medidas económicas que se apliquen, pero también es tan importante la previsibilidad”, explicó un empresario del sector vitivinícola.
La gran duda que se percibe en las empresas, teniendo en cuenta los dos candidatos que quedaron en juego, es cuál será la política económica real que impulsará el ganador. A esto se suma la posibilidad de alianzas y concesiones que deberá hacer con las otras fuerzas para imponerse en la segunda vuelta
Equilibrio fiscal sobre la mesa
“Hasta ahora Massa actuó en un equilibrio para contener el sector más duro del kirchnerismo, pero buscando sumar por el otro lado. Si llega a la presidencia, no está claro lo que puede llegar a hacer. Puede virar hacia el centro y más promercado, como se mostró cuando era opositor a su fuerza actual. Habrá que ver.
Lo mismo sucede con Milei. Su posición dura hacia la dolarización parece diluirse con este escenario ya que deberá negociar con parte de Juntos por el Cambio e, incluso, el sector del gobernador cordobés. Ahí es más confuso todo, ya que no se conoce qué puede hacer en lo económico si no dolariza”, advirtió un ejecutivo de una automotriz.
El clima expectante se centra también en un tema clave: el dólar. Tanto Massa como Milei tendrán que buscar la forma de conseguirlos porque es la única forma de que funcione la economía.
“Tendremos que esperar hasta que se decida quién será el presidente. Massa es alguien que va a tener en cuenta al mercado interno y a las pequeñas empresas. Es una opción más previsible. Milei es diferente, pero al no ganar en primera vuelta, su poder será distinto. Es todo muy incierto” dijo el representante de una cámara de industrias pymes.
Agenda prioritaria
Desde el sector inmobiliario, según un operador del sector, se vive la misma confusión: “Es un misterio lo que puede pasar en el corto plazo. Nosotros estamos pasando una etapa complicada. Venimos de un largo período de caída del mercado de compraventa y recién en los últimos meses se estaba recuperando. El segmento de los alquileres está paralizado y nuestros intentos de hacer cambios a la ley en el Congreso fueron fructíferos. Milei puede ir hacia una política distinta a la de los últimos años. Lo de Massa es más difícil de descifrar. Todo dependerá sobre qué sector se apoye.”
El único punto alentador que se valora en estos momentos es que, más allá de lo que suceda en noviembre, en 2024 habrá un nuevo gobierno con representatividad y poder.
“El próximo gobierno va a tener que negociar con las otras fuerzas en el Congreso. El que gane el ballotage tendrá que saber que sus votos propios son alrededor de un tercio del electorado y eso lo condicionará para llegar a acuerdos”, explicó el empresario inmobiliario.
“Los últimos dos años, a partir de la salida de la pandemia, el Gobierno fue perdiendo su brújula y llegamos al final del mandato con un presidente testimonial. Eso va a cambiar desde diciembre y es un dato que genera expectativa. Es lo único que se puede saber hasta ahora”, señaló un empresario turístico.