El papelón internacional de una empresa Argentina por el cepo al dólar

Es muy común escuchar, para definir un hecho llamativo, un dicho popular: si no fuera cierto, sería muy gracioso. En la Argentina abundan ejemplos que encajan en esa definición. En estos días de restricciones cambiarias, los diálogos con empresarios deparan sorpresas y muestran las dificultades que existen para operar en medio del cepo económico y un permanente cambio de reglas.

El CEO de una autopartista multinacional reveló a MDZ un episodio de esas características y que deja mal parado al país, por sus consecuencias internacionales. Obviamente, prefirió la reserva, ya que la exposición de estas situaciones no es bien recibida por algunos funcionarios.

Se trata de una compañía importante que tiene filiales en decenas de países. En la Argentina es proveedora de varias terminales y, a su vez, exporta a otros mercados.

El hecho sucedió meses atrás. Las demoras para liberar dólares, por parte del Banco Central, provocó que la empresa se atrasara en el pago a un proveedor internacional. Esto es algo que le sucedió y sucede a muchas industrias locales. El problema es que, en este caso, tuvo implicancias inesperadas.

El proveedor en cuestión, europeo y de alcance global, también abastecía a las filiales y la casa matriz de esta multinacional. Al detectar el retraso en el pago, decidió cortar los envíos de insumos a la multinacional, pero no lo hizo sólo a la filial argentina, que era la que estaba en “default”. Como en el sistema aparecía el retraso de esta empresa, tal vez por error, decidió también paralizar la provisión de productos a todas las filiales del resto de los países y hasta de la casa matriz.

Esto provocó un escándalo en la compañía y el nombre Argentina se escuchó en todas las oficinas. Hasta los directivos que poco sabían de cepos y trabas de este país remoto, se enteraron en ese momento de la realidad económica local.

“Fue un escándalo. Nos llamaron, nos dijeron de todo y no pudimos decir nada. Explicarle a directivos extranjeros, que viven a miles de kilómetros, que Argentina tiene todas estas dificultades es realmente complejo” dijo el CEO local a MDZ.

Después de algunas gestiones, el problema se solucionó y se normalizaron las entregas. El episodio quedó en el pasado.

Con las nuevas restricciones para acceder al dólar y las trabas para importar, toma dimensión esta reciente anécdota. Las consecuencias de esta medida ya tienen impacto en las empresas. Ayer, en muchas industrias se analizaba la letra chica del “supercepo” y cómo impactará en la producción.

La preocupación está centrada en las dificultades para garantizar el suministro de insumos para las empresas que producen en el país. En algunos casos, se estima que los dos próximos meses serán críticos en el abastecimiento. La falta de dólares es cada vez mayor y no hay un horizonte próximo en el que se vea una salida.

Más del 80% de las importaciones están destinadas a la producción que, a su vez, en buena medida, se exporta. Si se frenan los ingresos de productos del exterior, la consecuencia se notará en varias industrias.

Esto es en el corto plazo. En el mediano y en el largo, la incertidumbre pasa por la imagen que da el país en materia económica.

El CEO de esta multinacional lo explicó en detalle: “La realidad del país no ayuda para pensar en crecer. Mientras tengamos resultados positivos y no tengamos problemas de calidad, que impacten en el cliente global, seguiremos operando. Si llegamos a tener dos o tres años malos va a ser muy difícil sostener la filial argentina. Desde el punto de vista estratégico, para la casa matriz, estamos fuera del mundo. Ni hablar de nuevas inversiones. Es imposible. Hay que mantener los resultados con los activos existentes.”