Hasta el 1 de abril postergan plazos para pagar tarjetas de crédito y préstamos

En el marco de la cuarentena obligatoria dispuesta por el Poder Ejecutivo Nacional, el Banco Central estableció que los vencimientos de financiaciones de entidades financieras que se registren entre el 20 de marzo hasta el 31 de marzo inclusive pasan al 1 de abril.

El medida, difundida a través de un comunicado oficial, incluye a pagos de tarjetas de crédito, préstamos personales e hipotecarios y financiamiento empresario.

Durante el período de cuarentena general y obligatoria, las entidades financieras y cambiarias no podrán abrir sus sucursales para la atención al público, por lo que deberán seguir prestando servicios a los usuarios en forma remota. Por ejemplo, la constitución de plazos fijos, el otorgamiento de financiaciones y para garantizar los servicios relacionados con el sistema de pagos.

El BCRA garantizará la provisión de efectivo para que los bancos adopten todas las medidas necesarias, incluyendo los recursos humanos, para asegurar la suficiente provisión de fondos en cajeros automáticos y la continuidad de la operatoria relacionada con la extracción de efectivo en puntos de extracción extrabancarios.

En este período de emergencia no habrá compensación electrónica de cheques, por lo que las sesiones de compensación se reanudarán el 1 de abril. Tampoco se computará para el vencimiento de plazo de 30 días para la presentación de los mismos el 25 y 26 de mayo.

También dispuso que las entidades financieras y cambiarias podrán operar entre ellas y con sus clientes en el mercado de cambios de forma remota. El BCRA garantizará la operatoria, a través del SIOPEL, de las operaciones cambiarias mayoristas y de las licitaciones de LELIQ.

Se mantendrán operativas las Cámaras Electrónicas de Compensación, el Medio Electrónico de Pagos, las redes de cajeros automáticos y de transferencia electrónica de fondos, las administradoras de tarjetas de crédito y débito, como así también sus prestadores conexos y toda otra infraestructura de mercado que se requiera para la normal prestación de los servicios de las entidades financieras y de los sistemas de pago.