Ricardo Caruso Lombardi, ¿pájaro de mal agüero para el Lobo?
Ricardo Caruso Lombardi no prevé suerte para el desempeño del Lobo mendocino en la próxima final para ascender a la Liga Profesional.
Ricardo Caruso Lombardi vaticinó que Deportivo Madryn ascenderá a la Liga Profesional.
Era el entrenador elegido por los clubes de fútbol que estaban en situación crítica para permanecer en la máxima categoría del fútbol nacional. En la mayoría de los casos tuvo éxito, sobre todo cuando estuvo al frente de Racing y San Lorenzo, ambos muy apremiados y cercanos al descenso.
Extrovertido, polémico y confrontativo, también quiso incursionar en la política, pero sin ninguna relevancia. No pudo acceder a la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires.
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En la actualidad, alejado de la dirección técnica, incursiona en el periodismo deportivo en la señal TN. Enfrentado desde hace tiempo con el presidente de la AFA, Claudio Tapia, en sus apariciones en el programa TN Deportivo es especialmente duro cuando se refiere a su gestión.
También se centra en el arbitraje y señala sin tapujos los desempeños de referís que considera que fueron parciales o mal intencionados en la conducción de los partidos. Sin cortapisas ni límites, afirma que determinados resultados fueron “manipulados” por árbitros obedientes y funcionales a los deseos del mandamás “Chiqui”.
Hace un mes, aproximadamente, afirmó que el primer ascenso a la Liga Profesional lo disputarían Deportivo Madryn y Gimnasia de Mendoza,” los mendocinos”, como los citaba. Pronóstico acertado.
El sábado pasado, hace sólo tres días, aventuró también convencido, que el elegido para ascender era Deportivo Madryn de la provincia de Chubut.
Puede que el pitoniso, en esta oportunidad, falle en su predicción.
El presente del fútbol comandado por la AFA suscita críticas y sospechas variadas, relacionadas fundamentalmente a la organización de los torneos, los arbitrajes y el “trato especial” que parece recibir Barracas Central, el equipo de Tapia.
Hay que estar atentos y aguardar que en este vaticinio Caruso no acierte, como le sucedió en las oportunidades que no pudo salvar del descenso a los equipos para los que fue convocado. Su éxito no fue total.
“Las brujas no existen, pero que las hay, las hay”.